La Banda Simfònica Ciutat d'Eivissa continúa con su labor para llegar a todos los puntos del municipio de Vila con la música como la mejor tarjeta de presentación. Y en este recorrido le ha llegado el turno este fin de semana al barrio de es Clot, que celebra sus fiestas y en su programa incluye un concierto de la Simfònica este domingo a las nueve de la tarde en el Parc de la Pau.
Adolfo Villalonga, subdirector de la Banda Simfònica, será quien coja la batuta de la agrupación musical mañana para interpretar un programa que incluye La chica de Ipanema (Jobim, Saurer), Libertango (Piazzolla, Somadossi), Mexican Trumpets (Beck), La paloma (Yraddier, con arreglos de Nahohiro Iwai), Las playas de Río (Vlak), los mambos nº8 y nº5 de Pérez Prado, Johnny's Mambo (Bulling, con arreglos de M. Ferreira) y Novo Mambo (también con arrelgos de Ferreira).
«Son sus fiestas, así que hemos escogido un programa con música divertida y entretenida, para que la gente se lo pase bien», explica Villalonga, que recuerda que se trata de una serie de piezas que la Banda Simfònica ha interpretado en conciertos recientes en es Pratet y el Parque Reina Sofía. Pero también es un programa perfecto para una jornada en la que habrá otras actuaciones y mucha alegría y jolgorio en el Parc de la Pau. «No se pueden hacer piezas muy líricas o muy poéticas, porque se pierden muy rápidamente en una jornada festiva como esta», defiende el subdirector de la agrupación.
Además, Villalonga está convencido de que el público que asista al concierto disfrutará con él, algo que ya han hecho los músicos. «El programa está pensado para que sea agradable para tocar, de hecho nos divertimos en los ensayos». Una diversión que funciona como contrapunto de la preparación, mucho más exigente, del concierto que la Banda Simfònica acometerá el próximo 5 de agosto, en las Festes de la Terra. «Es el concierto más importante del año —asume Villalonga— y actuaciones como la de mañana son como un punto y aparte en esa preparación».
Con Manuel Ramon Mas como principal responsable de la Banda, Adolfo Villalonga ya ha cumplido una década como subdirector, labor que le permite dirigirla en ciertas ocasiones. Pero su relación con la Ciutat d'Eivissa dio comienzo como músico, una faceta que aún mantiene. «Sigo como músico cuando es necesario en la sección de trombones. Antes que capitán soy marinero», resume.
Evolución
Al reflexionar sobre la evolución que ha experimentado la Banda Simfònica en los últimos diez años, Villalonga cree que ésta es «buena y positiva». «La mayoría de la gente que empezó con nosotros sigue estando y si falta alguien es porque no está en la Isla. La Banda ha ido in crescendo». Un desarrollo que ha ido de la mano de una mayor presencia en la calle. «Hemos tocado por primera vez en es Pratet y el año pasado nos estrenamos en Cas Serres. Somos realmente la Banda Simfònica de la ciudad de Eivissa