El Paseo de Vara de Rey, situado en pleno corazón del centro de la ciudad de Vila, se convirtió ayer durante unas horas en una prolongación del mundo rural ibicenco gracias a la celebración de la tradicional xacota pagesa que organiza el Ayuntamiento de la localidad en colaboración con la Colla de sa Bodega.
Un año más, y ya van 24, las distintas muestras folclóricas pitiusas demostraron que siguen en plena forma. Cerca de doscientas personas acudieron hasta el lugar para escuchar como, por ejemplo, los jóvenes Dani ‘des Trull', Andreu y Jesús, miembros de la colla organizadora, realizaban varias sonadas, o, como, Antonia Torres y Pepita Palau, eran capaces de arrancar una risa al más serio de la tarde con las irónicas rimas de la cançó de porfèdia.
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