El maestro del pop art Andy Warhol dominó este jueves una multimillonaria subasta de Christie's, al vender su «Triple Elvis» por 81,9 millones de dólares y «Cuatro Marlons» por 69,6, aunque no se sumó a la lluvia de récords que sí afectaron a artistas como Roy Lichtenstein, Cy Twombly y Martin Kippenberger.
Sin embargo, la que más brilló en la puja dedicada a arte contemporáneo fue la propia casa de subastas, pues el monto total de la sesión llegó hasta los 852,9 millones de dólares, muy por encima de su competidora Sotheby's, que no rebasó los 400 millones, y marcando récord para la casa.
Más de 150 millones del total tuvieron solo un nombre: Andy Warhol. Y es que desde que un genio como Francis Bacon consiguió el récord del cuadro más caro jamás subastado por su estudio sobre Lucien Freud, otro genio, parece que la doble presencia célebre es una garantía de éxito para las subastas.
Warhol, quien recurriera a los iconos más populares para hacer el arte para las elites, se sumó a esta fórmula y volvió a demostrar el tirón económico de sus reconocibles propuestas, con las que quiso burlarse del arte pero acabó sucumbiendo a las reglas del mercado.
No alcanzó el récord superior a los 100 millones logrado con «Silver Car Crash», pero reinó en una noche en la que las cifras fueron estratosféricas.
Obras
Por su «Triple Elvis» se vivió una tensa puja de seis minutos coronada con una ovación. El rey del rock por partida triple alcanzaba más de 80 millones. Otro rey, esta vez del celuloide y esta vez por partida doble, se hacía con casi 70. Era Marlon Brando en su pose de chico rebelde en una imagen promocional de la película «Salvaje», filtrada por la mirada de Warhol.
También su «Mona Lisa», su versión del cuadro de Leonardo Da Vinci, se vendió por 5,9 millones de dólares.
Frente a su éxito, el relativo fracaso de la «Figura sentada», de Francis Bacon, que consiguió apenas llegar a las estimaciones más bajas, que fueron 40 millones.
Quedó así por ventas más que abultadas que facilitaron la gran noche a Christie's. Sobre todo, por 69,6 millones, el estadounidense Cy Twombly alcanzó su récord en subasta, pagados por su pizarra a gran escala.
No era el único artista que alcanzó su máximo histórico en la velada, pues se lograron un total de once. Entre ellos, se vendió por 30,4 millones «Smash(es)», de otro estadounidense, Ed Ruscha; por 22,5 un cuadro sin título del alemán Martin Kippenberger, y por 18,08 «Pine House (Rooms for Rent)», del escocés Peter Doig.
La artista Cindy Sherman, con sus «Capturas de películas sin título», también rebasó su marca precedente, ya que se adjudicó por 6,7 millones, Arshile Gorky hizo lo propio con los 8,9 de «Child's Companions».
George Baselitz, con «Der Brückechor», también se superó a sí mismo al lograr 7,4 millones, y lo mismo Seth Price, aunque este está menos cotizado, pues lo consiguió con «solo» 785.000 dólares.
Finalemente, Roy Lichtenstien, el compañero de arte pop de Warhol, colocó por 4,4 millones un dibujo, «Hot Dog», alcanzando récord en este formato. Además, tuvo otras ventas que superaron el millón de dólares, como «10 cents» (por 2,7 millones) o «Frighten Gril» (3,4 millones).
Y así, pese a que parecía que el ritmo de subastas de otoño suponía una desaceleración de la burbuja del arte, Christie's hoy volvió a desorbitarse.