Días después de haber sido emitido el programa de La Voz Kids en el que Aitana y María se quedan con la batalla, Marc Cuevas reconoce que le hubiera encantado poder seguir en el programa pero que aún así «la experiencia ha sido una pasada».
Uno de los concursantes ibicencos y discípulo también de Joaquín Garli comentó a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que desde ese día la gente le pregunta si le han dado algún premio y él responde que «Ellos no han dado ningún premio por pasar por ahí pero ahora me conoce todo el mundo, me animan, me quieren un montón, todo el mundo me apoya y ese premio vale más que cualquier cosa»
Marc volverá a los escenario el próximo mes de mayo en dos ocasiones. El jueves 18 voy a cantará un par de canciones en solitario y otras junto a su profesor Joaquín Garli en el festival a beneficio del Hunter organizado por Ivan Domenech que se celebrará en Can Ventosa. Dos días más tarde, el sábado 20 cantará ‘Reality' de Lost Frequencies en el desfile de la Moda Adlib que se celebrará en el puerto de Vila a pedido de su madre Elisa Pomar.
El joven recuerda que la aventura de La Voz Kids comenzó por un día en el que estando en la academia junto a Garli decidieron que se presentaría al concurso, «tenía que enviar una ficha con mis datos y dos vídeos. Uno cantando con base y otro a capella. Después solicitaron otro vídeo con una canción en especial, y más tarde tuve que confeccionar una lista con las mejores 20 canciones que se me daban cantar. Y un casting en Barcelona». Cada etapa dura unas tres semanas de pura ansiedad y emoción. Además, las audiciones se graban durante unos tres días en junio y las batallas septiembre. El camino fue largo pero valió la pena cada esfuerzo. Comenta que «con los coach super bien. Muchos me dicen que tendría que haber elegido a Antonio pero en ese momento no pensé en estrategias ni en nada. Se han girado los 3 y ‘tu' estás alucinando, me dejé llevar por lo que me gustaba y Rosario nos encanta».
Marc reflexiona a toro pasado que «quizás si hubiese elegido a Orozco, que es más mi estilo de música, a lo mejor él me hubiese dado una canción que fuera mejor con mi perfil. Igualmente estoy encantado con Rosario, me ha ido muy bien y me ha enseñado mucho. Me ha dicho que sonría siempre y que haga todo con mucha naturalidad. Me ha ayudado mucho, nos trata como a sus hijos. Los tres coaches son muy simpáticos».
Marc no duda ni por un instante en que nunca olvidará «las noches que he pasado ahí con todos mis compañeros, los amigos que he hecho. Nos íbamos todos juntos a cantar las canciones que nos gustaban después de cenar, y lo mejor ha sido compartir eso». El mejor premio han sido los amigos.