La estacionalidad condiciona de forma notable la economía de Balears. Es una realidad asumida y el gran reto pendiente de solución. Las Islas tienen un monocultivo turístico que paraliza casi por completo la actividad económica durante los meses de noviembre, diciembre, enero y febrero. Las peculiaridades del negocio turístico provocan que las Islas crezcan a menor ritmo que el resto de España en época de bonanza, pero que el PIB resista mejor con la crisis. La tasa de paro, en cambio, mantiene un comportamiento radicalmente diferente, puesto que el número de desempleados -con la crisis- creció mucho más en Balears que en el resto de España, aunque las Islas nunca llegaron a situarse por encima de la media estatal.
EL PIB. El informe de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) referido a las previsiones para las comunidades autónomas (2015-2016), editado el pasado mes de junio, explica que la media anual del Producto Interior Bruto entre 2001-2007 fue del 2,2%, mientras que la media española era del 3,6%. Balears presenta la media más baja de todo el Estado. Y con diferencia. España crecía con rapidez, a gran velocidad, y Balears, aunque mejoraba, lo hacía a un ritmo sustancialmente inferior. La media anual del PIB entre 2008 y 2013, los años de la crisis, el PIB de España presentó un creciminto negativo (-1,1%). Balears, en cambio, era la segunda comunidad que mejor aguantaba la crisis (-0,6%), solamente superada por Madrid (-0,3%). Queda claro que la fortaleza del sector turístico, incluso con el handicap que supone la estacionalidad, fue determinante para que la crisis tuviera menor virulencia en las Islas. Durante el pasado 2014, con España creciendo un 1,4%, Balears experimentaba un mejor registro (1,9%), si bien ya era superada por La Rioja (2,5%), Canarias (2,2%), Extremadura (2,2%), Comunitat Valenciana (2,1%), Murcia (2,0%) y Navarra (2,0%). De igual manera, las previsiones de Funcas apuntan a que Balears crecerá por encima de la media española durante 2015. Las Islas mejoraran su PIB un 3,5%, mientras que la media española será del 3,3%. En cambio, Balears crecerá un 2,5% en 2016, mientras que la media española ya será del 3,0%. Las Islas solo superarán a Canarias (1,9%), País Vasco (1,9%) y Asturias (2,3%), mientras que empatarán con Murcia (2,5%) y Cantabria (2,5%).
TASA DE PARO. La tasa de paro en Balears se sitúa siempre por debajo de la media española. Entre 2000 y 2007, cuando la economía crecía a buen ritmo, la tasa de paro media en España era del 10,5%, mientras que en Balears se quedaba en el 7,5%. Navarra presentaba entonces los mejores números, con una tasa de paro del 5,4%, seguida de Aragón (5,9%) y La Rioja (6,2%).
La media anual entre 2008 y 2013 se situó en España en el 20,2%, mientras que en Balears alcanzaba ya el 19,2%. De esta manera, aunque sin alcanzar la media estatal, la tasa de paro experimentaba en las Islas un ascenso muy superior a la práctica totalidad del resto de comunidades. Andalucía presenta la peor media anual entre 2008 y 2013 con una tasa de paro del 28,6%, seguida de Canarias (27,9%), Extremadura (25,2%), Murcia (22,9%), Comunitat Valenciana (22,5%), Castilla La Mancha (22,2%) y Balears (19,2%).
La previsiones de Funcas para 2015 y 2016 son buenas para el conjunto de España y, muy especialmente, para Balears. Las previsiones indican que la tasa de paro de las Islas se alejará de la media española durante este año, pero que durante 2016, pese a que continuará en descenso, la caída del desempleo será mucho mayor en el resto del estado. La Fundación de las Cajas de Ahorros apunta a que la tasa de paro se situará en Balears al finalizar este año en el 17,7%, mientras que en España la media se situará en el 22,2%. En el 2016, se reducirá en Balears hasta el 16,3%, mientras que en España se situará en el 20,2 por ciento.
De esta manera, y aunque las cifras de Balears son buenas, se puede comprobar cómo a medida que el desempleo se reduce, la distancia entre la tasa de las Islas y la media española se va acortando.
El informe de Funcas se refiere también a las cuentas públicas asegurando que “el déficit aumentó en casi cinco décimas porcentuales en 2014 hasta alcanzar el 1,7% del Producto Interior Bruto. Explica también que los ingresos descendieron, pese a una mayor recaudación impositiva. La explicación viene dada por la sustancial reducción de las transferencias del Estado.
Por otra parte, los gastos se incrementaron. Aumentaron las transferencias corrientes a otras administraciones públicas, las transferencias sociales en especie y las remuneraciones de asalariados. La Fundación Funcas asegura también que hasta el pasado mes de marzo de este año se había producido un incremento de los gastos, además de un descenso de los ingresos. De esta manera, se justifica que el ligero superávit registrado durante los tres primeros meses de 2014 se haya convertido este año en un déficit del 0,22%.