El PSOE ha ganado las elecciones generales de este domingo con 120 escaños, pero ha fracasado con la repetición electoral ya que se ha estancado en porcentaje de votos y ha retrocedido tres escaños. El resultado del resto de las fuerzas políticas no ayuda a que sume ni el bloque de la izquierda y ni el de la derecha para gobernar y además, ha propiciado que se acentúe el bloqueo. Así las cosas, las únicas salidas para formar gobierno son dos: o que Pedro Sánchez alcance un acuerdo con el PP o que pacte con Podemos y los independentistas.
El claro triunfador de la jornada ha sido el partido de Santiago Abascal, que ha pasado de 24 a 52 escaños, cumpliendo con el pronóstico que le daban muchas encuestas, aunque alguna llegó a vaticinar hasta 60 escaños para este partido. Vox ha logrado situarse como primera fuerza política en la Región de Murcia y como segunda en Andalucía.
Parte de esta victoria ha sido a costa de Ciudadanos, que se ha desplomado al perder 47 diputados y quedarse tan solo con 10. El partido de Albert Rivera se ha quedado con representación en tan solo cuatro comunidades autónomas: Andalucía, Cataluña, Madrid y Valencia.
El partido naranja queda así en una posición complicada porque ahora ya no sumaría con el PSOE para poder desbloquear la situación, como sí habría ocurrido tras el 28 de abril, ni tampoco con los partidos de la derecha, PP y Vox. Ello, a pesar de que el líder naranja ha anunciado durante la campaña su disposición a pactar con quien obtuviera más escaños para facilitar la formación de gobierno.
El Partido Popular, por su parte, ha logrado subir 21 escaños, al pasar de los 66 diputados que obtuvo el pasado 28 de abril a 87 parlamentarios. No obstante, este crecimiento es mucho menor del que auguraban sus dirigentes y más discreto que el que habían pronosticado los sondeos, que llegaron a vaticinar más de 100 escaños.
Unidas Podemos es otro de los partidos que ha sufrido un retroceso en el día de hoy, aunque ha aguantado a pesar de tener como competidor a Mas País, nacido de la costilla del partido morado y liderado por Íñigo Errejón. Pablo Iglesias ha logrado aunar un total de 35 escaños, de los que 26 son de Unidas Podemos; 7 los aporta EnComunPodem y 2 proceden de Podemos-EU en Galicia.
Sin embargo, Errejón no ha logrado capitalizar la pérdida que ha tenido el partido 'morado' y la división ha perjudicado a ambos partidos. Así, Más País solo ha conseguido entrar en el Congreso con dos diputados.
Por el contrario, los partidos independentistas han ganado terreno en el nuevo Congreso y contribuyen así a que se acentúe el bloqueo, salvo que Pedro Sánchez opte por contar con ellos para formar un gobierno.
De hecho, el partido independentista catalán más radical, la CUP, entra en el Parlamento con 2 escaños. El PNV gana uno y pasa a tener 7; Bildu gana otro y pasa a contar con 5 diputados; JxCat suma uno más y tendrá 8; vuelve el BNG con un representante y solo ERC pierde 2 y pasa de 15 a 13.