La idea de imponer una tasa extraordinaria a los bonus pagados a los directivos bancarios en 2009 cobra fuerza en la Unión Europea tras recibir ayer un fuerte impulso conjunto del primer ministro británico, Gordon Brown, y del presidente francés, Nicolas Sarkozy, durante la primera jornada de la cumbre de líderes europeos que pondrá fin a la presidencia sueca.
Los dos mandatarios ya han decidido introducir este impuesto extraordinario en Reino Unido y Francia alegando que las primas recibidas por los banqueros este año se deben en parte a las ayudas de los Gobiernos para rescatar de la crisis al sector financiero.
«Estamos de acuerdo en que la aplicación de un impuesto extraordinario a los bonus debe considerarse una prioridad, debido al hecho de que los bonus de 2009 han sido posibles en parte gracias al apoyo de los Gobiernos al sistema bancario», resaltaron el presidente francés y el primer ministro británico en un artículo conjunto publicado en el periódico económico Wall Street Journal.
La canciller alemana, Angela Merkel, prestó ayer su apoyo político a esta iniciativa aunque no aclaró si también está dispuesta a llevarla a la práctica, según informaron fuentes diplomáticas. Por su parte, el primer ministro luxemburgués y presidente del Eurogrupo, Jean Claude-Juncker, consideró que se trata de una «idea seductora».
«Ha habido grandes críticas por la vuelta de la cultura del bonus en este año 2009, un año de pérdidas en el sector financiero», dijo por su parte el primer ministro sueco y presidente de turno del Consejo Europeo, Fredrik Reinfeldt. Destacó que la tasa que proponen Francia y Reino Unido se refiere únicamente a este año porque la UE ya trabaja en medidas para restringir las primas de los directivos que entrarán en vigor en los próximos meses.
Por su parte, España acoge con cautela esta iniciativa. Fuentes de Moncloa recordaron que la ley de Economía Sostenible ya prevé que las retribuciones superiores a 600.000 euros se graven por vía del IRPF y que esta medida tiene carácter «estructural» y no extraordinario como el impuesto que proponen París y Londres.
El Reino Unido anunció este miércoles que impondrá una tasa extraordinaria del 50% para las primas cobradas por los banqueros en 2009 que superen las 25.000 libras (casi 28.000 euros). Y Sarkozy tiene intención de seguir la estela de Londres y también aplicará un impuesto similar a las primas de 2009 superiores a 27.000.