El escritor y ex ministro de Cultura español Jorge Semprún recordó ayer, junto a un centenar de supervivientes del campo de concentración nazi de Buchenwald (este de Alemania), la liberación de ese lugar, el 11 de abril de 1945, por los aliados estadounidenses.
El escritor y ex confinado de ese campo, el mayor construido durante el nazismo en territorio alemán, participó en las conmemoraciones del 65 aniversario de su liberación, en las que intervino asimismo el presidente del Parlamento alemán, Norbert Lammert.
Por la libertad
Semprún recordó el levantamiento de los presos, que salieron al encuentro de las tropas aliadas tras hacerse con las armas de los soldados alemanes.
Lammert, por su parte, instó a «defender» los principios de la libertad, la tolerancia y la humanidad frente al totalitarismo y recordó la doble experiencia de Buchenwald, como campo nazi, primero, y soviético, tras la Segunda Guerra Mundial.
Buchenwald fue construido en 1937 en las afueras de Weimar y hasta el 11 de abril de 1945 fueron recluidos ahí unos 250.000 presos de 36 países, en un principio prisioneros políticos, y luego judíos, homosexuales, gitanos y soldados soviéticos. Se calcula que unos 56.000 de esos presos murieron de hambre, enfermedad o a consecuencia de las condiciones del campo.
En la última fase de la Segunda Guerra Mundial los nazis empezaron a desmantelar el campo y obligaron a los presos a participar en las llamadas «marchas de la muerte», en condiciones inhumanas, en su huida de los aliados.
Parte de esos confinados se levantaron contra los nazis, mientras que los restantes 21.000 fueron liberados por los soldados estadounidenses cuando entraron en el lugar.
Semprún vuelve libre a Buchenwald
El escritor recuerda con un centenar de supervivientes la liberación del campo nazi
Efe |