La red terrorista Al Qaeda anunció ayer la muerte de su 'número tres' y máximo general de la organización en Afganistán, Mustafa Abu al Yazid, también conocido como Seij Said al Masri, que según fuentes del Gobierno de Estados Unidos podría haber muerto recientemente en las áreas tribales de Pakistán.
En un comunicado divulgado a través de varios foros yihadistas, Al Qaeda admitió la muerte de Al Yazid y prometió una respuesta por ello, informó SITE Intelligence Group, una organización estadounidense encargada del estudio y análisis del terrorismo global y sus redes. De acuerdo con dicho documento, Yazid falleció junto a su mujer, tres de sus hijas, su nieta y otras tres personas.
Las agencias de inteligencia de Estados Unidos tienen «sólidas razones» para creer que podría haber muerto en una zona tribal de Pakistán cercana a la frontera con Afganistán, según un alto cargo de la Administración estadounidense citado por Reuters.
Yazid, nacido en Egipto, era el presunto tesorero de todo Al Qaeda, el jefe de operaciones en Afganistán y uno de los fundadores de la red terrorista, según SITE. En el pasado ha protagonizado muchos de los comunicados y videos divulgados por las 'web' islamistas y por el brazo mediático de Al Qaeda, Al Sahab, informa la cadena CNN. Por ejemplo, fue el encargado de reivindicar el atentado contra una base del este de Afganistán en el que murieron siete agentes de la CIA.
Ataques
En los últimos meses las agencias de espionaje de Estados Unidos han incrementado el número de ataques aéreos con aviones no tripulados en las zonas tribales de Pakistán, consideradas como un refugio para los miembros de Al Qaeda y los milicianos talibán.
«Tenemos sólidas razones para creer que (...) Al Masri murió recientemente en las áreas tribales de Pakistán», indicó la fuente citada por Reuters. «En términos de lucha antiterrorista, sería una gran victoria».
«En algunos aspectos, su muerte es más importante para las operaciones de Al Qaeda que si hubiesen muerto Bin Laden o (el 'número dos', Ayman) Al Zawahiri», indicó el ex director de antiterrorismo del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos Roger Cressey, en declaraciones a la cadena NBC News.
El pasado mes de marzo, fuentes de la Administración norteamericana informaron de que un importante miembro de Al Qaeda había fallecido durante un bombardeo estadounidense en Pakistán. El director de la CIA, Leon Panetta, ha asegurado que los recientes ataques de los aviones no tripulados estadounidenses han obligado a Bin Laden y a otros líderes de la organización terrorista a esconderse aún más, dejando a la organización sin capacidad para perpetrar operaciones sofisticadas.