El informe de la Inspección General de Finanzas (IGF), que ayer publicó el Ministerio francés de Presupuestos, revela que el actual titular de Trabajo, Eric Woerth, no intervino para favorecer fiscalmente a la heredera de L'Oréal, Liliane Bettencourt. «El señor Woerth, durante el periodo en que era ministro de Presupuestos (entre mayo de 2007 y marzo de 2010), no intervino ante los servicios que estaban bajo su autoridad para pedir, impedir u orientar una decisión o control sobre la señora Bettencourt», señala el documento.
El informe lava la imagen de un ministro en serios apuros en las últimas semanas, ante las crecientes alegaciones de su implicación en el escándalo protagonizado por la heredera de la firma de cosméticos, de 87 años, considerada la mujer más rica Francia. Las conclusiones de este documento, que en principio no estaba previsto que se divulgara hasta hoy, suponen un alivio también para el presidente francés, Nicolas Sarkozy, que hoy será entrevistado, en directo y en horario de máxima audiencia, en la cadena de televisión pública «France 2».