España cuenta con una tasa de población en riesgo de pobreza del 19 por ciento, porcentaje que está por encima de la media de la UE, que se sitúa en el 16,3%. El dato sitúa a España como el séptimo país de la UE con mayor riesgo de pobreza, según un informe presentado ayer por Euroestat (Organismo de Estadísticas Comunitarias).
El 19 por ciento de los españoles están expuestos a la pobreza y viven en situación precaria, incluso después de recibir ayudas sociales.
España y Gran Bretaña son después de Grecia y Portugal (21%) los países de la Unión Europea con mayor número de personas cuyos ingresos no llegan al 60 por ciento de la media nacional, punto de corte donde se sitúa la pobreza.
Eurostat fija el límite de pobreza en España en 5.347 euros anuales (889.666 pesetas) para un hogar de una persona y en 11.229 euros (1.868.348 pesetas) para una familia de dos adultos y dos niños.
La situación en España ha empeorado de forma significativa en los últimos años, según Eurostat. El riesgo de pobreza afectaba en 1996 al 15% de la población.
Durante el Gobierno del Partido Popular ese porcentaje aumentó cuatro puntos, hasta situarse en el 19% en 1999, último año con cifras disponibles. Esto representa un aumento cuatro veces superior al que se produjo de media en la UE, donde el riesgo de pobreza pasó del 14% en 1996 al 15% en 1999. El 11% de los españoles se encuentran además en una situación de pobreza persistente, con ingresos inferiores al 60% durante al menos dos años.
España es uno de los países de la UE con menor nivel de protección social. Esto provoca que las ayudas sociales españolas, incluidas las pensiones, sólo permitan reducir en cuatro puntos el porcentaje de población con riesgo de pobreza. Sin esas ayudas, los españoles pobres sería el 23% de la población.