La fiscalía de Nueva York retirará los cargos por agresión sexual e intento de violación contra el ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn en su próxima comparecencia ante el juez, prevista el 18 de julio, o incluso antes, según informa este martes el diario sensacionalista 'New York Post', que cita a uno de los investigadores del caso.
«Todos sabemos que este caso no se sostiene», ha señalado la fuente, después de que el viernes pasado el juez encargado del caso autorizada la libertad sin fianza de Strauss-Kahn tras admitir la fiscalía que la demandante, una mujer guineana, había mentido en su solicitud de asilo y en algunos pasajes de su declaración.
«Su credibilidad es tan mala actualmente, sabemos que no podemos sostener el caso con ella», ha añadido el investigador, en referencia a la camarera del hotel en el que se alojó Strauss-Kahn y que el pasado 14 de mayo le acusó de haberla intentado violar en su habitación.
«No se le cree nada de lo que sale de su boca, lo que es una pena, porque ahora puede que nunca sepamos lo que ocurrió en aquella habitación de hotel», ha precisado la fuente, que pidió no ser identificada.
Nueva versión de los hechos
Por otra parte, el rotativo cita fuentes de la defensa que apuntan a un escenario diferente, según el cual, el ya ex director gerente del FMI habría mantenido sexo con la mujer a cambio de dinero en su habitación.
«En el pasado, los huéspedes habían dejado cosas para ella», ha señalado una fuente próxima a la investigación de la defensa, en referencia a dinero. Según la fuente, la mujer «volvió a buscar el dinero» y se sintió decepcionada.
Entretanto, el diario francés 'Le Figaro' publica hoy una información que viene a confirmar la primera versión ofrecida por la demandante y desmontada el viernes por los fiscales del caso. Según el rotativo, que ha tenido acceso a los datos extraídos de las tarjetas magnéticas de acceso a las habitaciones, la mujer no limpió otra habitación tras ser agredida por Strauss-Kahn, como habría señalado en su última versión.
Según los datos que recoge el periódico, la empleada entró en la habitación del entonces director del FMI a las 12:06 tras encontrarse con un empleado del servicio de habitaciones que le dice que no hay nadie. A las 12:26 la mujer abre una suite próxima, donde está algo menos de un minuto, para volver al lugar de los hechos.
Al parecer, su superior jerárquica la encontró en la otra habitación y le llevó a la de Strauss-Kahn para que le relatara lo ocurrido. Según 'Le Figaro', que cita al 'Daily Beast', estos datos no llegaron a manos del fiscal de Nueva York, Cyrus Vance, hasta el viernes, después de que se supiera que la demandante estaba perdiendo su credibilidad.