La tasa de emancipación residencial entre la población de 16 a 29 años de Baleares se sitúa en el 32,5 %, la segunda más alta de España (por detrás de Aragón), con 58.764 jóvenes emancipados en el primer trimestre del año, cifra que supone un descenso del 3,08 % respecto al mismo período del año pasado.
Los datos indican que Balears se mantiene como la segunda comunidad con más jóvenes emancipados a pesar de que los precios de la vivienda de las islas son de los más caros y el coste de acceso al mercado de la vivienda, tanto en propiedad como en alquiler, son de los más elevados, indica el Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud en España correspondiente al primer trimestre.
El informe pone de manifiesto que los ingresos mínimos necesarios para comprar una vivienda libre en Balears superan el 74,7 % del sueldo medio de un joven de entre 16 y 29 años.
El precio medio de la vivienda libre se sitúa en Baleares en 178.750 euros, con lo que se ha visto reducido en un 5,21 % en un año, de manera más ligera que en el conjunto de España y se sigue manteniendo como uno de los más caros.
Esfuerzo económico
El esfuerzo económico que deben realizar las personas jóvenes menores de 30 años para acceder a la vivienda en propiedad es uno de los más elevados de España. El alquiler tampoco es una opción viable para la mayoría de los hogares jóvenes y las personas asalariadas menores de 30 años.
Para que un hogar joven en Balears pudiera acceder sin riesgo de sobreendeudamiento a la compra de una vivienda debería ver aumentados sus ingresos en un 56,7 % y una persona joven asalariada debería hacerlo en un 128,35 %.
El paro, aún siendo elevado en las islas, muestra los menores niveles de desempleo de larga duración, indica este informe realizado con el cruce de datos estadísticos oficiales como la EPA o precios de vivienda del Ministerio de Fomento.
En Baleares, las personas jóvenes activas de 16 a 29 años apenas han disminuido un 2,16 % en un año y, en la actualidad la tasa de actividad en estas edades es del 63,4 %, la más alta de España después de la de Cataluña.
Los niveles de ocupación son aún más elevados entre las personas de 30 a 34 años. La población joven menor de 30 años ocupada es del 34,8 % y la tasa de paro en estas edades alcanza el 28,5 %.
Menor tasa de temporalidad
La ocupación se caracteriza por tener una de las menores tasas de temporalidad, más presencia de las jornadas a tiempo completo y menores niveles de sobrecualificación y de subocupación. El 89,7 % de la población ocupada de 16 a 29 años es asalariada.
Balears son la segunda comunidad autónoma con menos personas de 16 a 29 años que desempeñan trabajos que requieren una cualificación inferior a la que efectivamente tienen. El 77,3 % de las personas jóvenes asalariadas menores de 30 años no cursa estudios. De ellas más de la mitad, el 51,1 %, están sobrecualificadas.
La contratación temporal, pese a ser elevada, un 40,6 %, es la tercera más baja de España. El 43,7 % de la población joven asalariada entre 16 y 29 años con contratos temporales tiene contratos de menos de un año de duración.
La tasa de paro de la población joven de las Illes Balears es ligeramente superior a la del conjunto de España, pero la mayor parte de las personas desempleadas entre 16 y 29 años han trabajado con anterioridad. Tan solo el 16,8 % de los jóvenes parados están en búsqueda de su primer empleo.
Por otro lado, el tiempo en el desempleo es menor: solo el 29,1% de las personas desempleadas menores de 30 años son de larga duración.
Como en el resto de España, el desempleo afecta más a los y las jóvenes con menor nivel de estudios alcanzados. En el caso de Baleares, un 69,1 % de la población joven menor de 30 años con estudios primarios o analfabeta está desempleada.