La mujer cristiana condenada a muerte en Sudán por apostasía ha dado a luz a una niña en la prisión de Jartum donde permanece retenida junto a su otro hijo, de 20 meses de edad, según la ONG Amnistía Internacional, que ha instado a las autoridades del país africano a garantizar la «seguridad» de la madre y los dos bebés.
Meriam Yehya Ibrahim ha sido acusada de apostasía y de adulterio por haberse casado con un hombre cristiano, algo prohibido para las mujeres musulmanas y que hace que el nuevo matrimonio no tenga validez. Un tribunal la condenó a muerte y a recibir cien latigazos por los dos delitos.
La mujer, de 27 años, ha dado a luz a primera hora de este martes, un mes antes de que saliese de cuentas. Amnistía Internacional ha dicho que ni el abogado de Ibrahim ni su marido, de nacionalidad estadounidense, han podido visitarla, por lo que no se conoce cuál es su estado actual, informa el periódico británico 'The Guardian'.
Un portavoz de la ONG, Manar Idriss, ha subrayado que «el Gobierno sudanés debe garantizar la seguridad (de Ibrahim) y la de sus hijos, incluido el recién nacido». Amnistía Internacional ha reclamado la libertad incondicoonal para la detenida, que ha dicho ser hija de padre musulmán y madre cristiana y haber sido criada en esta última religión.
Los abogados de Meriam Yehya Ibrahim presentaron un recurso la semana pasada para solicitar su liberación. Idriss ha admitido que no hay un plazo fijo para la resolución de estas peticiones, ya que aunque «habitualmente lleva meses», la Justicia sudanesa podría pronunciarse «mucho más rápido» por la atención mediática internacional.
Amnistía Internacional ya ha recogido más de 700.000 firmas a nivel mundial para solicitar la liberación de Ibrahim.