Entre 6.000 y 8.000 refugiados procedentes de Macedonia han llegado en las últimas 24 horas a la localidad de Presevo, en el sur de Serbia, donde aún acuden personas, según informó este domingo un representante de la Cruz Roja, Ahmet Hallimi, a la agencia de noticias serbia Beta.
Además, en una aldea cercana a Presevo, Miratovac, esperan otros 5.000 refugiados que hoy han recibido la visita del ministro de Defensa, Bratislav Gasic, quien pronosticó que esta afluencia continuará en los próximos días.
«Nos hemos visto obligados a crear aquí en Miratovac un nuevo centro de recepción de refugiados, además del de Presevo. Aquí hay ya más de 5.000. Estimamos que también en los días venideros los refugiados llegarán con igual intensidad», evaluó Gasic.
Los medios serbios apuntan a que en los pasos fronterizos de Bogorodica y Djevdjelija con Macedonia ya no existe la dramática aglomeración de refugiados que se daba en los últimos días, ya que las autoridades macedonias los han dejado pasar a Serbia y han organizado mejor su transporte hacia el norte.
Serbia se ha convertido en un país de tránsito para los refugiados, cuya aspiración es proseguir viaje hasta países más al norte.
«La gran mayoría de los refugiados tiene la intención solo de transitar por Serbia. Su destino es Alemania y Suecia, sobre todo, según afirman, donde tienen ya sus comunidades, parientes y amigos», explicó a Efe Mirjana Milenkovski, portavoz de ACNUR Serbia.
Tanto la Cruz Roja como ACNUR proveen a los inmigrantes de alimentos, agua y medicinas, pero no su transporte dentro del país.
Los refugiados que llegan a Serbia tratan por ahora de pasar a Hungría, que para impedir su entrada ya está construyendo un muro a lo largo de la frontera con su vecina sureña.