Más de 7.000 inmigrantes y solicitantes de asilo cruzaron la frontera de Serbia procedentes de Macedonia durante la noche del sábado al domingo, según ha informado el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
Estas personas consiguieron llegar hasta Serbia tras cruzar procedentes de Grecia y coger un tren en la localidad macedonia de Gevgelija, según ACNUR, que ha advertido de que hay cientos más en la frontera y podrían producirse más llegadas.
La agencia de la ONU está ayudando a las autoridades y las ONG de Serbia a recibir y asistir las nuevas llegadas en el centro de tránsito de Presevo, en el sur. Aquí, ha entregado algunos alimentos y, en respuesta a una petición del Gobierno serbio, está analizando el modo de enviar más suministros, incluidas colchonetas, mantas y tiendas de campaña.
ACNUR ha estado prestando asistencia en los últimos días a los refugiados e inmigrantes que han quedado atrapados en la frontera entre Grecia, principal puerto de entrada a Europa en la actualidad, y Macedonia.
Las autoridades macedonias cerraron temporalmente la frontera el viernes y el sábado, ante la imposibilidad de gestionar la llegada masiva, pero ACNUR ha recibido garantías de Skopje de que «la frontera estará abierta para los refugiados que huyen del conflicto en sus países de origen», según un comunicado de la agencia de la ONU.