La Fiscalía de Sao Paulo ha pedido prisión preventiva para el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, acusado de blanqueo de capitales y falsedad ideológica por, supuestamente, haber recibido un tríplex como pago de la trama corrupta de Petrobras.
Los fiscales Cassio Conserino, José Carlos Blat y Fernando Henrique Araújo han argumentado que la prisión preventiva es necesaria para garantizar «el orden público, la instrucción del proceso judicial y la aplicación de la ley penal».
La Fiscalía ha acusado a Lula de ocultación de patrimonio, una versión del delito de blanqueo de capitales por el que podría ser condenado a entre tres y diez años de cárcel, y falsedad ideológica, con un marco penal de uno a tres años.