Varios gobiernos de países árabes, entre ellos los de Arabia Saudí, Jordania y Egipto, han condenado con firmeza los atentados que tuvieron lugar la mañana de este martes en la capital belga y rechazaron cualquier tipo de violencia y terrorismo.
El rey Salmán bin Abelaziz de Arabia Saudí calificó estos ataques de «actos criminales» y pidió que se unan los esfuerzos de la comunidad internacional para luchar contra el terrorismo.
Por su parte, el monarca jordano Abdalá II instó, tras reunirse con la alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Federica Mogherini, a impulsar la lucha global contra en terrorismo.
Según un comunicado de la Casa Real, el monarca «subrayó la necesidad de impulsar los esfuerzos de la lucha contra el terrorismo y enfrentarse a sus bandas, y expresó su fuerte condena de los atentados terroristas ocurridos en Bruselas», que causaron al menos 34 muertos y 200 heridos.
Esos atentados han sido reivindicados por el grupo terrorista Dáesh, según anunció la agencia de noticias Amaq, vinculada a esta organización yihadista, y un comunicado de la organización.
El presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, condenó estos ataques terroristas aberrantes y rechazó todos «los actos que intimidan o se cobran las vidas de gente inocente».
Por otra parte, reiteró su total solidaridad y sus condolencias con el Gobierno y el pueblo de Bélgica y pidieron que haya más esfuerzos internacionales para acabar con el terrorismo.
Emiratos Árabes Unidos se sumó a la condena de la «cobarde acción terrorista contra civiles inocentes» que tuvo lugar en Bélgica, en un comunicado oficial.
El ministro de Estado para Asuntos Exteriores emiratí, Anuar bin Mohamed Qarqash, reiteró que su país «rechaza todas las formas de violencia y terrorismo sea cual sea su origen».
Asimismo, manifestó su apoyo y solidaridad con Bélgica y su pueblo en la lucha contra el terrorismo y el extremismo, e instó a la comunidad internacional a unirse para erradicar ambas lacras.
Por su parte, el ministerio de Exteriores de Baréin emitió un comunicado de condena, en el que expresó su solidaridad con el reino de Bélgica «en la lucha contra todas las formas de violencia, extremismo y terrorismo, cualesquiera que sean su origen y objetivos».
Baréin expresó asimismo el pésame a los familiares de las víctimas que perdieron la vida en estas «acciones criminales que contradicen los principios de todos los valores éticos, humanos y religiosos», según la nota.
Asimismo, el secretario general de la Liga Árabe calificó dichos ataques de «actos terroristas mezquinos» que pretenden «desestabilizar la seguridad y la estabilidad del mundo entero».
Además, pidió que haya más esfuerzos a nivel internacional para «erradicar las raíces del terrorismo y secar sus fuentes» y exigió a que se les impide a los terroristas que lleguen a «los medios tecnológicos avanzados» que utilizan en sus ataques.