Una mujer estuvo a punto de morir en la provincia de Shaanxi, en China, pero su saludable melena y la rápida reacción de su marido la salvaron.
Todo ocurrió en cuestión de segundos cuando, tras un arrebato por una discusión, la mujer se encaramó a una azotea, dispuesta a lanzarse al vacío desde una altura de unos 20 metros.
El marido, ante la escena, trató de agarrarla, y lo hizo por los pelos –nunca mejor dicho–, asiéndola por la coleta en el último instante, y soportando el peso de su esposa durante casi tres minutos, el tiempo que tardó la policía en llegar a socorrerla.