El ministro del Interior francés, Bruno Le Roux, ha dimitido este martes después de que la Fiscalía Financiera abriese una investigación contra él por contratar a sus dos hijas como asesoras de la Asamblea Nacional cuando todavía eran menores de edad.
«Mi responsabilidad totalmente es preservar la acción del Gobierno», ha explicado Le Roux en una comparecencia, poco después de entregar su dimisión al presidente de Francia, François Hollande. El ministro saliente, no obstante, ha defendido su «honestidad» frente a la polémica.
El programa Quotidien, de la cadena francesa TMC, reveló el lunes que las hijas de Le Roux se habrían beneficiado de 24 contratos como colaboradoras parlamentarias mientras éste era diputado. Las menores, por entonces de 15 y 16 años, habrían cobrado unos 55.000 euros.
Le Roux ha considerado necesario hacerse a un lado por el bien del Gobierno y de un Ministerio, el de Interior, responsable de la lucha contra el terrorismo. Francia se encuentra en estado de emergencia desde la cadena de atentados del 13 de noviembre de 2015 en París.
El Elíseo ha informado en un comunicado de la salida de Le Roux, que aspira a «proporcionar todas las precisiones útiles para el establecimiento de la verdad». Su cargo será ocupado por Matthias Fekl, hasta ahora secretario de Estado de Comercio Exterior.
Este escándalo ha golpeado la campaña electoral cuando los franceses aún digieren la imputación del candidato presidencial de Los Republicanos, François Fillon, por la supuesta contratación ficticia de su mujer, Penelope, como asesora parlamentaria, gracias a los cual se habría embolsado cientos de miles de euros.