Al menos diez personas han muerto por dos atentados con bomba registrados este lunes en la capital de Somalia, Mogadiscio, entre ellos un miembro del Gobierno fallecido por la explosión de un artefacto adosado a su vehículo, según un balance divulgado por las autoridades locales.
Por otra parte, al menos nueve militares han muerto cuando «un terrorista suicida con un chaleco explosivo ha entrado en su campamento y se ha inmolado después de disparar a los soldados», ha explicado un portavoz policial, Nur Hussein.
Un coronel ha explicado que el terrorista, vestido con uniforme, irrumpió en las instalaciones pocos minutos después del entrenamiento. Esta segunda fuente ha cifrado en varias decenas el número de heridos y ha alertado de que «algunos de ellos están en estado grave».
El grupo Al Shabaab, vinculado a Al Qaeda, ha reivindicado la autoría de este ataque. La organización también mató el domingo al menos a 15 personas por la explosión de un coche bomba a las afueras de una base militar en Mogadiscio.
El nuevo presidente somalí, Mohamed Abdullahi Mohamed, ha declarado la «guerra» contra el terrorismo, que ha aumentado sus ataques tras la toma de posesión del nuevo Gobierno. El país vive inmerso en una violencia constante desde 1991, tras el derrocamiento de Siad Barre.