Charlie es un niño británico de diez años que padece síndrome de Asperger. Visitaba junto a sus padres el Museo de Historia Natural de Londres cuando detectó un error en el rótulo de un protoceratops, al que se identificaba como oviraptores. El pequeño, al que le encantan los dinosaurios, explicó a sus padres que aquello era imposible porque los oviraptores caminaban a dos patas y no a cuatro, como los protoceratops.
Los padres del pequeño dudaban de su explicación. «Charlie tiene Asperger y, como consecuencia, cuando algo le gusta mucho, quiere saberlo todo sobre eso», han comentado a la cadena BBC.
Pero Charlie no se equivocaba y al portavoz del museo no le quedó más remedio que reconocer el error. La galería de dinosaurios había sido modificada varias veces y eso había dado lugar al error en el etiquetado.