Al menos 94 personas han muerto y casi un centenar han resultado heridas por la explosión de un camión bomba ocurrida este sábado en una intersección del suroeste de la capital de Somalia, Mogadiscio, según ha confirmado una ONG internacional con presencia en el país africano y un diputado del Parlamento somalí.
El balance de la ONG corrobora el proporcionado por el diputado Abdirizak Mohamed, quien ha estimado un total de 94 muertos -- 17 policías, 73 civiles somalíes y cuatro extranjeros -- mientras fuentes médicas bajo anonimato del hospital de Medina cifran los heridos en torno al centenar.
Entre estos cuatro fallecidos hay al menos dos personas de nacionalidad turca, integrantes de un equipo de ingenieros que se encontraba prácticamente justo al lado de la detonación, según ha confirmado la Embajada de Turquía en Somalia al servicio de información internacional de Estados Unidos, Voice of America.
El servicio de ambulancias de la capital, Aamin, ha confirmado que la explosión pertenece a la de un camión bomba -- se desconoce si con un terrorista suicida al volante -- en un punto de control situado en un cruce empleado por los vehículos que llegan a la capital somalí desde la localidad de Afgoye, situada a unos 20 kilómetros al este de la urbe.
Se da la circunstancia de que en las inmediaciones de la explosión hay una oficina de Tráfico que visitan diariamente decenas de personas para pagar sus impuestos de circulación, de ahí el elevado número de fallecidos.
Este atentado se trataría del tercero más sangriento de la historia reciente de la capital, por detrás del ocurrido el 14 de octubre de 2017 -- 587 muertos -- y el de octubre de 2011 -- 100 muertos --.
Aunque ningún grupo ha asumido la responsabilidad del atentado, el Gobierno somalí ha sospechado inmediatamente del grupo terrorista Al Shabaab, responsable principal de estas matanzas en Somalia.