La pandemia del nuevo coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan ha dejado en las últimas 24 horas en Alemania 5.132 casos nuevos y 43 muertos, la mayor cifra de contagios en el cómputo diario desde el 10 de abril y que eleva el total a más 334.000 personas contagiadas y 9.677 víctimas mortales, según el balance publicado este miércoles por el Instituto Robert Koch (RKI), la agencia gubernamental encargada del control de las enfermedades infecciosas.
Por lo que se refiere a las recuperaciones, 281.900 personas han conseguido superar la COVID-19, la enfermedad respiratoria provocada por el coronavirus, incluidas 2.500 que han recibido el alta en las últimas 24 horas.
Renania del Norte-Westfalia es la región más castigada, con 82.356 casos y 1.923 muertos, seguida por Baviera, con 74.459 y 2.693 fallecidos, y Baden-Wuertemberg, con 55.639 casos y 1.909 decesos. Berlín contabiliza 19.033 contagios y 237 víctimas mortales.
Alemania es uno de los países más afectados por la crisis del coronavirus en Europa después de España, Francia, Reino Unido e Italia. El país alcanzó el pico de contagios en el marco de la pandemia entre finales de marzo y principios de abril, con más de 6.000 casos diarios, tras lo cual la cifra cayó para volver a aumentar en julio.
Las recomendaciones
Así las cosas, el RKI ha advertido este martes de que se deberán mantener restricciones vigentes en el país, como el uso de mascarillas y el distanciamiento, pese a la llegada de una vacuna contra el coronavirus.
Según el plan estratégico presentado por la entidad, en 2021 habrá una o dos vacunas disponibles y la lucha contra el coronavirus mejorará considerablemente. Sin embargo, una vacuna en principio solo se aplicará en cantidades limitadas y beneficiará sobre todo a los grupos de riesgo por lo que el RKI considera importante mantener "determinadas modificaciones en la convivencia".
Entre ellas, según informa la agencia DPA, la entidad apuesta por mantener el distanciamiento social, el uso de mascarillas, la ventilación de los espacios así como el traslado de actividades de ocio al aire libre, de ser posible.
"En las próximas semanas y meses en el manejo de la COVID-19 necesitamos medidas restringidas en lo temporal y lo regional, que se adapten al riesgo respectivo", afirmó el presidente del RKI, Lothar Wieler. Según el plan, la meta es evitar tanto como sea posible una sobrecarga del sistema sanitario, efectos secundarios de la enfermedad y casos de muerte.
En lo que se refiere a escuelas y guarderías, el RKI señala que, de acuerdo con la información disponible, queda claro que "las entidades educativas son uno de los lugares que tienen un papel en las infecciones". Sin embargo, es importante mantenerlas abiertas respetando las medidas higiénicas dispuestas, añadió.
En relación a los viajes, el RKI subraya que "una movilidad mayor (ya sea por trabajo o privada) significa un mayor riesgo". Sin embargo, a su juicio, el riesgo no depende en principio del destino del viaje, sino esencialmente del comportamiento del individuo en una zona con riesgo de contagio.
Por último, el RKI se pronuncia a favor de vacunar ampliamente a los grupos de riesgo contra la gripe y el neumococo. "Para el control de la pandemia en los próximos meses tendrán un papel decisivo las vacunas contra otras enfermedades de las vías respiratorias sobre todo en la época más fría del año", advierte. De esa manera, concluye, las personas estarán protegidas y el sistema sanitario menos cargado.