ETA anunció ayer a través de un vídeo y un comunicado difundidos por la BBC su decisión, «tomada hace varios meses», de no llevar a cabo «acciones armadas ofensivas», aunque sin especificar si se trata de una medida permanente o sólo temporal.
En su nota, ETA se dice dispuesta «hoy como ayer a acordar las condiciones democráticas mínimas para poner en marcha un proceso democrático, si el Gobierno español tiene voluntad».
Pero en un claro intento de internacionalizar cualquier solución, los terroristas hacen un llamamiento «a la comunidad internacional para que participe en la construcción de una solución duradera, justa y democrática a una secular lucha política», pero no hablan en ningún momento de verificación.
ETA reafirma su voluntad de articular «el proyecto independentista» y señala que el «Estado español es consciente de que el País Vasco se halla en una encrucijada» y «puede optar por la vía de la independencia». Acusa al «Estado español» de querer crear «las condiciones en las que todo quede bloqueado» y tratar de «evitar el diálogo político y asfixiar las aspiraciones del pueblo en un estado de excepción».
Califica de «agotado» el marco autonómico y señala que «ha llegado el momento de construir un marco democrático para el País Vasco, respetando los deseos de la mayoría del pueblo vasco». «El cambio político es posible. Pero en ese camino no hay atajos», dice ETA, según la cual «el camino de la libertad hay que andarlo paso a paso, tal vez con flexibilidad, pero son necesarios el esfuerzo y la lucha para alcanzar ese objetivo».
Según la organización terrorista, la puerta «a la verdadera solución del conflicto» no se abrirá hasta que «se reconozcan y ratifiquen los derechos del País Vasco».