CiU vencería en las elecciones catalanas del 28 de noviembre con un 38 por ciento de los votos y 59 escaños en el Parlamento autonómico, con lo que ganaría once diputados y se quedaría a nueve de la mayoría absoluta, en tanto que el PSC (22,7 por ciento) perdería cuatro y lograría 33 parlamentarios.
En coincidencia con el primer día de la campaña electoral catalana, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha dado a conocer un estudio preelectoral de los comicios del 28 de noviembre, según el cual la tercera fuerza más votada sería ERC, con el 10,2 por ciento del escrutinio, pero perdería entre cinco y seis escaños.
El PP y C's se mantienen
Por su parte, el PP, con el 9,7 por ciento de los votos, mantendría su representación actual (lograría entre 13 y 14 escaños), ICV perdería un diputado (quedaría con 11 con el 8,2 por ciento de los sufragios) y Ciutadans C's mantendría sus tres parlamentarios con un 3,5 por ciento del escrutinio.
Si el día 28 de noviembre se confirmaran estos resultados en las urnas, el actual tripartito (PSC-ERC-ICV) no podría repetirse, ya que la suma de todos sus escaños se quedaría como mínimo a ocho diputados de la mayoría absoluta en un Parlamento que cuenta con 135 sillones.
CiU podría buscar como aliado al PP, con cuyos votos se garantizaría la mayoría absoluta en el Parlament.
La encuesta, realizada a 2.966 personas entre el 15 de octubre y el 4 de noviembre, refleja que el candidato más valorado por los ciudadanos catalanes es el presidente de CiU, Artur Mas, que, con un 5,33, es el único líder que aprueba.
A continuación le sigue el candidato de ICV, Joan Herrera (4,53 puntos), por delante del actual presidente de la Generalitat y cabeza de lista del PSC, José Montilla, que se queda con un 4,37.