El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado hoy que, aunque el PSOE «sufre», hay «razones bastante objetivas» y de «interés general» para concluir la legislatura, ya que es necesario concluir las reformas en marcha para asentar la recuperación y crear empleo.
En un bronco debate en el pleno del Senado, Zapatero ha respondido al portavoz del PP, Pío García Escudero, quien ha descrito a un Ejecutivo «sin pulso y en fase terminal» y un panorama de «descomposición política, económica y democrática» y le ha garantizado que España puede afrontar sin problemas un adelanto electoral y un cambio de Gobierno: «Lo necesita urgentemente».
Zapatero ha acusado al PP de generar alarma y desconfianza y ha insistido en que concluirá las reformas previstas porque su compromiso con el país está por encima de cualquier interés personal o de partido, un partido que, ha dicho, «sufre» cuando se adoptan medidas duras y difíciles pero lo acepta por el interés general.
«Sólo quien sabe sufrir sabe poner el interés general por encima del interés electoral, de partido y el interés a corto plazo, que es el que ustedes vienen representando y así no sirven a España. Espero que ni siguiera se sirvan a sí mismos», ha espetado a la bancada popular.
Para Zapatero, las razones que aconsejan continuar con la legislatura son «bastante objetivas, bastante razonables y tienen que ver con el interés general», aunque García Escudero le ha instado a ser consciente de «la imagen tan impropia y tan lamentable que España está dando al mundo».
«Si no ha sabido estar sepa irse en buena hora, deje de ser un obstáculo», le ha pedido al presidente del Gobierno antes de citar un verso de Pablo Neruda representativo, a su juicio, de lo que será su legado: «todo en ti fue naufragio».
Frente a sus críticas, Zapatero ha destacado el proceso de reformas iniciado en 2009 para modernizar la economía, desde el sistema financiero hasta el mercado laboral, y ha subrayado los esfuerzos de consolidación fiscal y la reforma de las pensiones.
Una ley «razonable» que, a su juicio, el PP sólo critica por «demagogia populista», para caer «más simpáticos» a los ciudadanos.
Según Zapatero, las medidas aprobadas dan credibilidad a la solvencia de las cuentas españolas en un marco de intensas turbulencias.
«Le debería alegrar y debería decir que estamos aguantando la capacidad de financiarnos porque es vital para el país y da confianza a los mercados y no transmitir siempre alarma, dramatismo y dificultades», ha reprochado al portavoz del PP.
Pero sus argumentos no han convencido a García Escudero, para quien «lo que es realmente grave e irresponsable es prolongar este tiempo perdido, con un Gobierno sin liderazgo, los ministros ausentes y con el país paralizado y a la deriva».
Ha instado así a Zapatero a evaluar si España puede permitirse el lujo de mantener un Gobierno que en lugar de bicefalia padece de «acefalia».
Ha cargado así las tintas contra la actividad del vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, como candidato del PSOE para las próximas elecciones generales, a quien ha acusado de haber sido elegido «a dedo» para luego «hacer galas por España en avión oficial», pero Zapatero no le ha respondido a estas acusaciones porque Rubalcaba estaba ausente.
García Escudero ha denunciado también la «descomposición económica», con la «prima de riesgo disparada» y sin saber si el Gobierno tendrá apoyos para aprobar los presupuestos para 2012, y el «tremendo retroceso democrático».
Ha acusado en ese contexto al Ejecutivo del regreso del «vandalismo proetarra de la mano de Bildu": «Hemos retrocedido muchos años y para mal», ha manifestado.