ETA, en un comunicado anunciado el viernes y publicado en la edición impresa de ayer del diario Gara, afirma que pese a que se está empleando «intensamente» para posibilitar «un proceso de resolución», los Estados español y francés «no han puesto más que obstáculos» y «la estrategia represiva y las medidas de excepción no han cesado».
En su nota, la banda terrorista recuerda que han pasado diez meses desde que dio carácter general y permanente a su alto el fuego y ofreció, además, que fuera verificado por la comunidad internacional, iniciativa que califica de «unilateral» y que suponía «secundar el camino marcado por el Acuerdo de Gernika», además de reflejar «el compromiso firme con el final de la confrontación armada y con la solución al conflicto político».
«Desde entonces», añade el comunicado, «ETA se está empleando intensamente para posibilitar un proceso de resolución, como se ha comprobado en iniciativas públicas y también mediante un trabajo callado que no ha tenido reflejo público».
Frente a esta postura, la banda imputa a los Estados español y francés los obstáculos que, según ella, ha puesto al proceso, entre los que Gara cita las detenciones y «torturas salvajes» a ciudadanos vascos, las euroórdenes, la prolongación de «la política penitenciaria criminal», la vulneración de los derechos civiles o el mantenimiento de la estrategia de ilegalización de la izquierda abertzale.
Asimismo, la organización terrorista afirma que Madrid y París, de quienes dice que persisten en «zancadillear y embarrar la resolución», han querido también bloquear la creación de la Comisión de Verificación del alto el fuego «negándole aval oficial».
«Pese a ello, ETA ha respondido a los intentos de bloqueo y a la cerrazón ofreciendo oportunidades», afirma la banda.