Trece días después de la tragedia en el Madrid Arena en la que cuatro jóvenes murieron aplastadas por una avalancha humana, el tercer teniente de alcalde y delegado de Economía, Empleo y Participación Ciudadana del Ayuntamiento, Pedro Calvo, ha presentado hoy su dimisión tras ser imputado en el caso. El juez Eduardo López Palop ha citado como imputado a Calvo, que además de concejal de Economía es el presidente de la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, propietaria del recinto Madrid Arena, donde ocurrieron los hechos.
Tras conocer su imputación, Calvo ha dimitido de todos sus cargos municipales: tercer teniente de alcalde, concejal delegado de Economía, Empleo y Participación Ciudadana y portavoz del grupo municipal del PP, además de presidente de Madrid Espacios y Congresos. La dimisión de Calvo había sido solicitada por la mayoría de los grupos de la oposición junto con la de otros altos cargos del Gobierno local y de la empresa municipal, entre ellos el vicealcalde, Miguel Ángel Villanueva, que fue anteriormente presidente de Madrid Espacios y Congresos.
Dimisión de Botella
Para el secretario general del PSM, Tomás Gómez, esta dimisión no es suficiente, y ha opinado que quien tiene que dimitir «con carácter inmediato» es la alcaldesa, Ana Botella. Una opinión que ha compartido el portavoz socialista en el Ayuntamiento, Jaime Lissavetzky, que ha criticado a Botella por su «pésima gestión», «falta de transparencia y de información» y «cerrazón» a la hora de buscar responsabilidades políticas.
IU, por su parte, ha valorado la «coherencia» y «disposición» de Calvo a la hora de asumir sus responsabilidades, y ha instado al equipo de gobierno municipal a que delimite «claramente» cuáles han sido las responsabilidades concretas y a que se agilice la investigación interna.
El juez, acompañado por el fiscal superior de Madrid, Manuel Moix, llevó a cabo ayer una inspección ocular en el pabellón donde ocurrieron los hechos la madrugada del día 1 de noviembre. También acudieron a la inspección representantes de la Policía Científica y de la Brigada de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía, así como dos policías nacionales y un agente municipal de Madrid que acudieron a la fiesta estando fuera de servicio.