Diego Torres, exsocio del Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, ha entregado al juez instructor del caso Nóos correos electrónicos en los que figura el nombre de la noble alemana Corinna Sayn-Wittgenstein, amiga del Rey don Juan Carlos, y en los que se la implica en las actividades del Instituto Nóos. Asimismo, se ha conocido que el testaferro del Duque le propuso un «truco» para que no pareciera el «alma mater» en la Fundación DCIS.
En estas correspondencias con la noble alemana, a las que ha tenido acceso Europa Press, la entidad le agradece su participación en la primera edición del Valencia Summit, evento investigado por un supuesto desvío de fondos públicos.
Los correos han sido recientemente aportados por la defensa de Torres al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, y en uno de ellos Francisco Larrey, quien fuese empleado de Nóos, ironiza, dirigiéndose al presunto testaferro de Urdangarin, Mario Sorribas: «Mario, ¿crees que me podré casar con la señorita Corinna?».
En otro email, Sorribas agradece a Larrey la participación de Corinna con un «'ahí has 'estao' torero Francisco! Yo creo que éste es el camino para llegar a cualquier parte del mundo». Por su parte, la propia noble también da las gracias a Larrey en otro email, afirmando en inglés, haberle alegrado el día ("it made my day!!!") tras su irónico comentario.
En respuesta del 2 de noviembre de 2004, el propio empleado de Nóos le dice a Corinna «you are a lovely woman» ("eres una mujer maravillosa"), agradeciéndole su presencia en el Valencia Summit de 2004 y confiando en contar con ella en la edición de 2005 y comentándole, en inglés, que si necesita cualquier cosa en Barcelona o Valencia le pida ayuda. Despidiéndose con un «much love» ("mucho amor").
Según los documentos aportados por Torres, ese mismo día Corinna vuelve a escribirle para dedicarle «unas pocas líneas» con las que agradecerle la «fantástica organización en Valencia» y «toda vuestra asistencia con nuestros viajes, etc. Hemos pasado un tiempo maravilloso. Con los mejores recuerdos, Corinna».
La entrega de los correos ante el Juzgado coincide con la presentación, por el abogado de Torres, de un escrito en el que hace referencia a la petición de archivo formulada por el supuesto hombre de paja de Urdangarin, calificando de «intolerables, amén de poco afortunadas», las reflexiones vertidas por Sorribas en su solicitud.
La defensa de Sorribas afirmó en su escrito, al que tuvo acceso Europa Press, que su patrocinado, quien ejerció como apoderado en la inmobiliaria que el marido de la Infanta Cristina comparte al 50% con su mujer, era un «currante» considerado como «muy trabajador y servicial», pero sin ninguna capacidad de decisión ni mando.
De hecho, en esta misma línea el abogado incidía en que «absolutamente todos cuantos han declarado en la condición que fuera han indicado de manera taxativa y sin dudar quiénes eran los dueños del Instituto Nóos» -en alusión a Urdangarin y a Torres-, «quiénes se ganaban la vida con la ganancia empresarial de sus actividades y quiénes eran los que mandaban y tomaban todas las decisiones».
SORRIBAS PROPUSO DISIMULAR EL PAPEL DEL DUQUE EN LA FUNDACION
Mario Sorribas, presunto testaferro, apoderado y hombre de confianza del Duque de Palma, le envió en noviembre de 2007 un correo electrónico en el que le proponía «una especie de truco» para «no dejar en evidencia que tú eres el 'alma mater'» al frente de la Fundación de Deporte, Cultura e Integración Social (DCIS), impulsada por el yerno del Rey Don Juan Carlos en 2007.
De acuerdo al email aportado, junto con otros correos comprometedores por la defensa del exsocio de Urdangarin Diego Torres, y al que ha tenido acceso Europa Press, Sorribas propuso disimular el papel que desempeñaba en esta entidad el marido de la Infanta Cristina, después de que la web de la Casa Real integrase un párrafo relativo a la vinculación de Urdangarin «con fundaciones y filantropía».
Así las cosas, Sorribas asevera en el correo que, dado que la información de la Casa Real «es pública y también habla de la Fundación DCIS, ahora sí creo conveniente documentar en nuestras comunicaciones que tú formas parte de la Fundación. Además, convendría decir que hace tiempo que estás trabajando aquí», añade.
El «truco» propuesto por Sorribas consistía en integrar noticias relativas a la vinculación de Urdangarin con la Fundación «de forma retroactiva», esto es, «decir a nuestra web que cuelgue una noticia en el mes de marzo pasado diciendo que tú ya estás ahí. Es una especie de truco a la computadora muy fácil de hacer».
Asimismo, el supuesto hombre de paja del Duque, quien ha solicitado el archivo de su imputación en el marco de estas pesquisas, manifestaba a Urdangarin que «preferiría tratarte como he tratado a todos los demás deportistas».
«Con esto y desde ahora», añade el remitente, «nosotros podemos entregar un dossier de prensa a quien sea diciéndole que tú, como cualquiera de los demás deportistas que nos acompañan, llevas vinculado a nosotros unos cuantos meses y de una forma totalmente naturalizada».
«Al principio eres uno entre tantos, aunque a la larga te hayamos nombrado 'primus inter pares'» (primero entre iguales), añade Sorribas. El imputado afirma que «dejas de aparecer como 'impulsor' y nadie puede decir que ésta es la Fundación de Iñaki».
EL DUQUE COBRO 140.000 EUROS EN UNA CUENTA DE SUIZA
Además, Urdangarin cobró presuntamente 140.000 euros en una cuenta corriente domiciliada en Suiza por la búsqueda de inversores en favor de la empresa Inversiones Financieras Aguas de Valencia (AGVAL), servicios por los que inicialmente pactó percibir 125.000 euros trimestrales junto a su colaborador José María Treviño, trabajos que no fructificaron.
En un escrito de la Fiscalía Anticorrupción incluido en una subpieza del caso Nóos que hasta el momento se encontraba bajo secreto y a cuyas diligencias ha tenido acceso Europa Press, la acusación pública señala que fue a principios de 2008 cuando Urdangarin se puso en contacto con el presidente de la anterior empresa, Eugenio Calabuig, para impulsar estos proyectos.
Según el Ministerio Público, el colaborador de Urdangarin usó los servicios del testaferro Robert Cockx, quien cedió su empresa fiduciaria Alternative General Services, domiciliada en Irlanda y cuya cuenta corriente estaba en Suiza. El supuesto hombre de paja habría cobrado un 5% de las operaciones por figurar en las mismas.
Así, el contrato entre Urdangarin y Treviño con Calabuig fue suscrito formalmente por Cockx en representación de Alternative General Services, por la búsqueda y localización de proyectos que no fructificaron, lo que motivo la rescisión del acuerdo.
Fue entonces cuando Cockx, por orden del Duque y su colaborador, emitió tres facturas contra AGVAL por un importe global de 375.000 euros, que fueron transferidos en la cuenta corriente de Cockx en Suiza. Acto seguido, el presunto testaferro, tras descontar su 5%, traspasó el restante a otra cuenta suiza perteneciente a la empresa Star Opcions, de Treviño.
Así, desde la cuenta del colaborador de Urdangarin se realizó otra transferencia, por importe de 140.000 euros, para el pago de los servicios del propio Duque.
En el mismo escrito, el Ministerio Público señala asimismo cómo en 2006 Urdangarin y su exsocio, Diego Torres, ordenaron al encausado Miguel Tejeiro poner en marcha las gestiones necesarias para crear una estructura societaria fiduciaria con el objetivo de ocultar los verdaderos beneficiarios de los fondos que transitarían por la misma, y obtener beneficios fiscales derivados del régimen al que estaban sometidas estas estructuras.