El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) estaría dispuesto a no sumarse a los 10 paros de 24 horas previstos en marzo, entre los días 4 y 8 y 18 y 22, para ayudar a la mediación acordada entre los sindicatos y la dirección de Iberia a cambio de que ésta readmita a los más de 10 pilotos despedidos en 2012, según informaron fuentes del sindicato a Europa Press.
El colectivo de pilotos propone la desconvocatoria de la huelga durante la mediación siempre que la empresa readmita a los pilotos despedidos, algo más de una decena de trabajadores que perdieron su puesto de trabajo de forma paulatina en 2012 por diferentes motivos, utilizados como «rehenes» para las negociaciones.
De no alcanzarse un acuerdo y si no se procede a la readmisión de los pilotos despedidos, el colectivo se sumará previsiblemente a las convocatorias de huelga contra el plan de reestructuración de Iberia a partir del 4 de marzo, para secundarla del lunes 4 al viernes 8, y del lunes 18 al viernes 22.
Los pilotos acordaron adherirse a los paros, a excepción de los convocados para esta primera semana de huelga, ante el «inaceptable» Expediente de Regulación de Empleo (ERE) propuesto por Iberia que contempla 3.807 despidos, el 19 % de la plantilla, entre ellos unos 320 pilotos.
La dirección de la compañía ha citado para este jueves por la tarde al sindicato Sepla para tratar los diferentes aspectos del ERE incluido en el plan de reestructuración propuesto.
Valoran la mediación
Este jueves la ministra de Fomento, Ana Pastor, ha informado de que la dirección de Iberia y los sindicatos han alcanzado un acuerdo para que el catedrático de Derecho privado, social y económico de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Gregorio Tudela, sea mediador en el conflicto abierto en la aerolínea.
Así, Sepla se mostró favorable al establecimiento del mediador, «cuyo nombre da lo mismo» ya que es «bienvenido todo lo que sirva para solucionar el conflicto y llegar a una solución satisfactoria», apuntó.
En este sentido recordó que desde la parte sindical están «totalmente dispuestos a negociar» pero que es la dirección de la aerolínea la que «no quiere negociar ni apearse del burro» a pesar de la última oferta de los sindicatos que contempla reducciones salariales, productividad y acepta bajas laborales.
De esta forma, Sepla lamentó que mientras que «los trabajadores ya han entregado lo que pedía Iberia», la dirección de la empresa «es la que no quiere ofrecer un plan de crecimiento» que garantice el futuro de la compañía.