La Comisión Europea (CE) revisó hoy al alza sus previsiones de crecimiento económico de la zona del euro, que cifró en el 1,2 % para este año y en el 1,8 % para 2015, mientras que las del conjunto de la Unión Europea (UE) progresarán el 1,5 y el 2 %, respectivamente.
El Ejecutivo comunitario, que hoy publicó sus previsiones macroeconómicas para los países del euro y de toda la UE para 2014 y 2015, apuntó que «la recuperación seguirá en la mayor parte de los Estados miembros» y a «un aumento moderado del crecimiento».
«La recuperación gana terreno en Europa, después de que el año pasado hubiera un retorno al crecimiento», dijo el vicepresidente de la CE y responsable de Economía, Olli Rehn, que subrayó también que «el refuerzo de la demanda interna este año deberá ayudar a un crecimiento equilibrado y duradero».
Asimismo indicó, mediante un comunicado, «el reequilibrio de la economía europea progresa y la competitividad exterior mejora, sobre todo en los países vulnerables».
«Incluso si lo peor de la crisis está ya probablemente detrás, no hay que relajar los esfuerzos porque la recuperación es todavía modesta. Pare reforzarla y crear empleo, hay que mantener el ritmo de las reformas económicas», afirmó.
En cuanto al déficit público, el Ejecutivo comunitario prevé que siga adelante su reducción, y pronostica que en 2014, ese indicador caerá al 2,7 % del PIB en la Unión (mismo porcentaje para 2015) y al 2,6 % (2,5 % en 2015) entre los países que comparten el euro.
Entre las debilidades que persisten en la zona euro y en el conjunto de la UE, el documento apunta a las dificultades en financiación y a que el paro sigue siendo muy elevado, aunque también señalan que el mercado laboral «se estabiliza lentamente».
La CE estima que habrá «un débil aumento del empleo este año y un descenso de la tasa de desempleo» que debería situarse en el 10,4 % en la UE y del 11,7 % en la zona euro de aquí a 2015, al tiempo que las disparidades entre los países siguen siendo muy pronunciadas.
En cuanto a la inflación, la CE señala que en 2014 debería situarse en el 1,2 % entre los Veintiocho y en el 1 % en la zona del euro, para aumentar hasta el 1,5 % y el 1,3 % en 2015, respectivamente, una vez que se agilice el crecimiento.