La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha instado este domingo a pedir perdón a los ciudadanos en la campaña de las elecciones europeas de mayo por no haber vigilado suficientemente contra la corrupción, en una convención en la que el PP de Madrid ha instado a evitar la tentación del voto de castigo.
Ante un auditorio con más de 500 cargos, militantes y simpatizantes, Aguirre ha defendido que pedir excusar debe ser un elemento «principal» en la campaña por los «demasiados» casos de corrupción que han salpicado a este partido y «por no haber vigilado todo lo que era necesario».
Según Aguirre, recuperar la confianza y la estima de los ciudadanos es «imprescindible» de cara a estas elecciones, en las que ha pedido a los candidatos que luchen contra la «lejanía» que, a su juicio, existe entre electores y elegidos.
En la convención, diferentes responsables del PP de Madrid han advertido contra la tentación del voto de castigo a formaciones minoritarias sin el suficiente peso como para ser relevantes en la toma de decisiones europeas.
El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha pedido a la ciudadanía que huya de los partidos que aprovechan las elecciones europeas para tratar de sacar una «ventaja» política que «no sirve de nada» en el contexto europeo.
González, que ha cargado contra lo que él califica de izquierda radical que hoy se manifiesta en la calles de Madrid, ha defendido que no es tiempo de aventuras ni de ocurrencias y que es el PP el que tiene un proyecto que pasa por ser fuertes e influyentes en Europa.
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha alertado de que este voto de castigo es un riesgo para el PP encarnado en aquellos que no han comprendido las decisiones de la formación, motivo por el cual ha instado al electorado a tener en cuenta que ese voto «inicia procesos que nunca se sabe dónde pueden terminar».
Según Botella, el voto de castigo es el segundo -en importancia- de los tres «riesgos» a los que se enfrenta el PP el próximo 25 de mayo, junto a la apatía -"la idea de que votar, o no, da igual"- y el voto «antisistema».
Por su parte, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha cerrado la convención con un alegato en positivo para construir el futuro de España con «la E de Europa» y «sobre todo» de «empleo».
La ministra ha puesto en valor, frente a la «herencia» del PSOE, dos años de gestión del Gobierno en los que el paro ha empezado a bajar tras seis años de crisis y España ha pasado de ser el país del «rescate» al del «crecimiento y estabilidad del euro».
Báñez se ha mostrado convencida de que el PP recabará el 25 de mayo el mismo apoyo que en las anteriores elecciones y ha reprochado a los socialistas que se presenten diciendo que representan el futuro, cuando ante la crisis «pretendieron quedarse de brazos cruzados y esperar a que pasara la tormenta».
A dos meses de las elecciones, los participantes en la convención del PP de Madrid se han centrado en la importancia de las elecciones europeas y han dejado de lado el debate político sobre el hecho de que el PP no haya presentado por el momento su candidatura.
Al respecto, la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha indicado que el PP presenta una lista, y no un candidato, a la pregunta de los periodistas de si no le parece raro que la formación aún no haya desvelado quién será el cabeza de lista.
La convención se ha desarrollado entre numerosas referencias al expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, cuyo estado de salud es muy grave y al que todos han recordado, así como a su familia.
Mientras que Báñez ha ensalzado su liderazgo en el camino a la democracia, González ha sostenido que representó durante el 23F la «dignidad de todos», Aguirre ha enviado «muchos ánimos» a su familia y Botella ha destacado que posibilitó, junto al Rey, pasar de la dictadura al sistema actual.