El juez Fernando Andreu se ha visto hoy obligado a dejar en libertad a ocho ciudadanos egipcios que fueron detenidos el 6 de marzo tras ser interceptados en un barco pesquero con trece toneladas de hachís cuando navegaban por aguas de Almería, como consecuencia de la reforma de la ley de justicia universal.
El juez de la Audiencia Nacional ha tomado esta decisión en un auto tras comprobar que con la nueva normativa en materia de jurisdicción universal los tribunales españoles carecen de competencia para juzgar a estos detenidos por un delito de tráfico de estupefacientes cometido por ciudadanos extranjeros y en un barco sin bandera.
La justicia española no puede ya perseguirles al no responder este caso a los nuevos requisitos de la justicia universal, dado que ni son españoles, ni el barco tenía bandera, ni el delito se iba a cometer en España porque, tal y como declararon, venían de Alejandría, cogieron la droga en Marruecos y su destino era Libia.