La cabeza de lista del PSOE a las elecciones europeas del próximo 25, Elena Valenciano, ha pedido este domingo a la socialdemocracia española y europea que se una y plante cara a la derecha del PP y a la que gobierna en Europa, que «son la misma», y ha advertido: «Poco a poco, nos lo están quitando todo».
«Vamos a darle una lección a la derecha del austericidio que está acabando con nuestra esperanza», ha reclamado ante unos 4.000 militantes y simpatizantes en un mitin en Málaga, junto al candidato de los socialdemócratas a presidir la Comisión, Martin Schulz, y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.
Un día recortan la sanidad, otro la educación, luego las pensiones, ha avisado Valenciano antes de preguntarse qué se debe hacer ente ese panorama.
La disyuntiva, según su criterio, es agachar la cabeza o plantar cara, y ella lo tiene claro: «¿Nos rendimos o nos unimos? Nos unimos y les plantamos cara a la derecha española y europea (...) Nos unimos los socialistas de Europa para cambiar la UE a favor de España y a favor de Andalucía y de Europa».
Valenciano, quien ha asegurado que no va a dedicar «ni un segundo» al candidato del PP, Miguel Arias Cañete, se ha comprometido a volcar todo su tiempo en defender a la ciudadanía «de gente» como el ex ministro de Agricultura.
«Yo no soy como Cañete», ha diferenciado, porque de él sólo escucha «insultos» y ella va a responder «a cada insulto con una propuesta».
Se ha mostrado convencida, en este punto, de que habrá debate con Arias Cañete el próximo martes, pese a que el PP está tratando de «huir» del «cara a cara», como hace siempre que gobierna, ha lamentado.
La también vicesecretaria general del PSOE ha opinado que la derecha europea y española «son lo mismo»: la europea es la que ha gobernado durante toda la crisis económica con una mayoría «amplísima», que le ha permitido imponer su programa de recortes «por encima de todo», y la segunda es la que lo ha aplicado en España.
Unos recortes -ha incidido- que han llevado a más paro, más pobreza y más desigualdad y a un modelo dual de sociedad, en el que hay ciudadanos con recursos y derechos y ciudadanos que «no tienen derechos porque no tienen recursos».
Frente a ello, ha afirmado que la socialdemocracia es la única que puede dar la vuelta a la situación y aprobar medidas de estímulo a la economía y la inversión, imprescindibles, a su juicio, para volver a crear empleo manteniendo el Estado social.
Hasta tal punto le «conviene» al país una victoria socialdemócrata, a su entender, que hasta el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acude a la canciller alemana, Angela Merkel, cuando se trata de defender su ideología, pero «se va a ver» a los socialistas franceses o italianos cuando están en juego los intereses de España.
Tras apostar por una Europa «en la que el sur pese», Valenciano ha confiado en una UE no sólo sin fronteras geográficas, sino también «sin fronteras entre hombres y mujeres».
Para ella, ser madre es lo mejor que le ha pasado en la vida y, por eso, quiere que las mujeres puedan seguir decidiendo sobre su maternidad como hasta ahora y que no se reforme la actual ley de interrupción voluntaria del embarazo.
«Aunque sólo sea porque la derecha quiere quitarnos la libertad para elegir, porque quiere dejar a los jóvenes sin ninguna opción salvo que tengan recursos, aunque sólo sea porque han decidido volver a la España de ricos y pobres, hay que votar al PSOE el 25 de mayo», ha espoleado. Y ha pedido el voto para que gane «la primavera andaluza, socialista y española en Europa».
Susana Díaz, por su parte, ha instado al Gobierno de Rajoy a mirar a Andalucía y a la UE a mirar hacia el sur del continente, la «Europa luminosa» que, a su juicio, es necesario recuperar, porque se ha demostrado que «es posible» otra forma de gobernar. Díaz ha sentenciado que un triunfo del PSOE el próximo 25M marcará el «camino de salida» a Rajoy.
Martin Schulz ha tachado de «vergüenza» que haya gente sufriendo en la UE por las «malas decisiones» de la derecha, que han agravado las diferencias entre el norte y el sur del continente y entre los ricos y los pobres.
Schulz ha dicho entender la indignación de la ciudadanía, pero ha animado a que dirijan su descontento en las urnas y voten contra quienes han conducido a Europa a esta situación, porque los recortes «sin más, sin ninguna visión de futuro, no funcionan».