La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, anunció ayer que va a pedir a la Comisión Europea en el Comité de Gestión del próximo jueves en Bruselas que retire producción del mercado, a ser posible de manera retroactiva, para evitar «en la medida de lo posible cualquier perturbación del mercado» por el veto ruso.
En concreto, después de una reunión con el sector, señaló que la retirada debe ser financiada a través del fondo de gestión de crisis que se aprobó en la última reforma de la Política Agrícola Común (PAC). «Esta es la primera y más urgente medida que España va a pedir a la Comisión», indicó.
Tejerina recordó que el Gobierno había acordado la retirada de 10.000 toneladas de melocotones y albaricoques, que tienen como fin último destinarse a ayuda humanitaria o a la transformación. Así, el Gobierno solicitará a la CE «ampliar esa medida de retirada en cuanto al volumen y también en cuanto a sectores de frutas afectadas».
Alternativas
Además, specificó que entre enero y mayo las exportaciones a Rusia de los sectores que están ahora cerrados alcanzaron los 107 millones de euros.
Paralelamente, la ministra especificó que a nivel nacional hay analizadas medidas complementarias si llegara el caso de que fueran necesarias y que a «medio plazo» se continuará trabajando para «encontrar mercados alternativos».
Finalmente Tejerina explicó que el próximo lunes se volverá a reunir con el sector para «dar cuenta del desarrollo y las propuestas de las negociaciones» y se reunirá también con la distribución para que «contribuya con la promoción en España del consumo de frutas y hortalizas».
La Comisión Europea consideró ayer prematuro avanzar cifras concretas de ayudas para compensar al sector agrícola europeo por las restricciones que ha impuesto Rusia a productos agrícolas como las frutas y verduras en represalia por las sanciones de Occidente.