La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, se ha declarado hoy contenta de haber podido declarar «por fin» sobre el incidente de tráfico que protagonizó el pasado mes de abril en la Gran Vía de Madrid, por el que hoy ha comparecido ante el juez como imputada.
Ante los numerosos medios de comunicación que la esperaban en la puerta, la presidenta del PP de Madrid ha indicado a su salida del Juzgado de Instrucción de plaza de Castilla que ha contestado a todas las preguntas del juez y de la acusación particular sobre el incidente.
Aguirre ha permanecido en el Juzgado de Instrucción número 14 de Madrid una hora y cuarenta minutos para declarar por un supuesto delito de desobediencia por su actuación en aquel incidente.
A su salida, ha celebrado poder haber dado cuenta de un incidente que, ha remarcado, se produjo el 3 de abril: «Y estamos a 22 de septiembre», ha apostillado.
Aguirre también ha precisado que su declaración ha sido grabada, por lo que los medios de comunicación podrán «tener acceso» a ella.
La presidenta del PP de Madrid ha eludido contestar a preguntas de los periodistas sobre si esta declaración le puede afectar a su carrera política.
Al abandonar el juzgado, rodeada por unos setenta periodistas, varias ciudadanos que han aguardado a su salida la han increpado con gritos como «sinvergüenza», «ladrona» o «pija».
Horas antes, a su llegada al juzgado -pasadas las 10.20 horas-, Aguirre también evitó en varias ocasiones responder a las preguntas de si se siente respaldada por su partido en relación a este incidente de tráfico.
Entonces, avanzó que pediría disculpas por haber cometido una infracción y que contaría al juez «cómo fue todo» y «toda la verdad».
El titular del Juzgado de Instrucción número 14 de Madrid, Carlos Valle, dictó el pasado día 12 el auto en el que citaba a declarar a Aguirre como imputada por un delito de desobediencia a agentes de la autoridad.
Esa decisión tuvo lugar después de que a principios de mes la Audiencia Provincial de Madrid ordenase que el asunto se instruya como un supuesto delito de desobediencia a los agentes municipales que participaron en el incidente y no como un falta, como defendía el propio juez y la Fiscalía Superior de Madrid.
Numerosos medios de comunicación han seguido la llegada de Aguirre al juzgado para informar sobre el caso, que podría complicar las posibles aspiraciones de la presidenta del PP de Madrid para ser la próxima candidata del PP a la alcaldía de Madrid.
Para el día 30 de septiembre, a las 10:00 horas, han sido citados en calidad de testigos seis agentes de movilidad y dos policías municipales que intervinieron en el incidente de tráfico protagonizado por la política.