El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha garantizado este lunes que ni él ni el resto de dirigentes del PP tuvieran «la más remota idea» sobre la existencia de una caja B en el partido, y ha rechazado tener que estar contestando cada día a las declaraciones del extesorero popular Luis Bárcenas.
Rajoy se ha referido al caso Bárcenas y a su acusación de que había una caja B en el PP en una entrevista en Telecinco en la que ha asegurado entender las exigencias ciudadanas en materia de corrupción.
«Me niego a estar todo el día debatiendo con el señor Bárcenas cuando tenga a bien hacer una declaración. Llegará el momento -ha añadido- en que los tribunales de justicia digan lo que tienen que decir».
El presidente ha insistido en que no conocía la existencia de una caja B y que no ha recibido en ningún momento dinero negro, y ha subrayado que él y su partido ya han dado muchas explicaciones sobre este asunto.
Para él, lo importante es que se castigue a los que hacen lo que no deben y, en ese contexto, ha dicho que, en la actualidad, los policías, la guardia civil, los fiscales, los jueces, la agencia tributaria y la intervención del Estado están actuando con más libertad y eficacia que nunca.
«Quien la hace, la paga», ha reiterado Rajoy, quien ha explicado que el Gobierno va a seguir dedicándose a cumplir con su obligación y continuar aprobando iniciativas legislativas contra la corrupción.
Ha destacado que todas las personas del PP involucradas en el caso Bárcenas ya no están en el partido y ha asegurado que él se toma muy en serio estos asuntos porque es muy peligrosa la generalización de estas prácticas hacia toda la clase política.
Lo que sí se ha mostrado convencido es de que, ante las nuevas medidas que se están poniendo en marcha contra la corrupción, «vamos a estar bastante vacunados todos para mucho tiempo».