La portavoz nacional de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, ha rechazado este martes pedir que abandonen el escaño los tres diputados que le han exigido responsabilidades por el mal resultado electoral obtenido en Andalucía y se ha mantenido firme en su decisión de no dimitir porque asegura que cuenta con el respaldo de la mayoría del partido.
Así ha reaccionado Rosa Díez en declaraciones a los medios de comunicación en los pasillos del Congreso a la decisión de los diputados Alvaro Anchuelo e Irene Lozano de dejar su puesto en el Consejo de Dirección y las críticas vertidas por el también parlamentario y candidato a la Generalitat valenciana, Toni Cantó.
«Lamento mucho que hayan dimitido del Consejo de Dirección mis dos compañeros parlamentarios, son dos compañeros queridos con los que he trabajado bien y espero seguir trabajando bien en el grupo parlamentario», ha respondido Rosa Díez.
De esta forma, ha insistido en que no cree que deban abandonar su escaño el Congreso porque «son buenos diputados» que «hacen un buen trabajo» y confía en que puedan seguir colaborando durante los próximos meses. «Son dos personas extremadamente responsables, dos buenos compañeros», ha zanjado.
En este escenario, Rosa Díez ha insistido en que no tiene previsto abandonar el liderazgo de UPyD después de obtener el respaldo de la mayoría del Consejo de Dirección. «Respeto muchísimo la posición de las minorías, pero de la misma manera respeto la decisión de la mayoría», ha enfatizado.
Rechazo a pactar con Ciutadans
Según ha ensalzado, UPyD merece «todo el orgullo y reconocimiento» por su trabajo y ha defendido que es «único» en los asuntos que defiende, como su «infatigable lucha contra la corrupción» de la que ninguna otra formación «ha tomado la bandera».
También ha revelado que se sometió a votación la posibilidad de volver a abrir negociaciones con Ciudadanos, una opción que también fue rechazada. Según ha señalado, la mayoría del Consejo de Dirección votó a favor de «seguir siendo un partido autónomo» y presentarse a las elecciones por su cuenta.
Gorriarán llama «irresponsables» a quienes abandonan el barco
Mientras, el 'número dos' de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Carlos Martínez Gorriarán, ha tildado este martes de «irresponsables» a quienes «abandonan el barco» cuando las cosas van mal y les ha acusado de haberse implicado en política pensando en su carrera personal «y nada más».
Gorriarán, secretario de Acción Política de UPyD y 'mano derecha' de Rosa Díez, ha defendido ante los medios de comunicación la gestión de la formación 'magenta' pese a los malos resultados obtenidos en Andalucía y ha cargado contra los diputados Irene Lozano y Alvaro Anchuelo que este lunes decidieron dejar sus cargos en el Consejo de Dirección, igual que hicieron David Andina y Rodrigo Tena.
Antes de la Junta de Portavoces del Congreso, Gorriarán ha defendido que «para ganar lo que hace falta primero es saber perder» y quienes «no saben perder no merecen ganar». «Cuando alguien se marcha cuando las cosas cree que están mal, indica que no merece estar cuando las cosas vayan bien», ha emplazado.
Y aunque ha rechazado valorar si Anchuelo y Lozano -junto a Toni Cantó, que también pidió responsabilidades a la dirección- tendrían que dejar sus escaños en el Congreso, ha insistido en que «el que abandona un barco cuando las cosas van mal dadas no es un responsable, es un irresponsable».
Se busca un chivo expiatorio
Gorriarán ha sostenido que las riendas de UPyD cambiarán de manos cuando así lo decidan los militantes y ha recordado que este sábado se celebrará un Consejo Político en el que, entre otros asuntos, se abordará el resultado electoral obtenido en Andalucía, donde el partido se ha quedado de nuevo fuera del Parlamento autonómico.
El responsable de Acción Política de la formación ha rechazado personalizar la causa del mal resultado en Rosa Díez y ha justificado que todos los partidos «suben y baja y tienen resultados mejores y peores». «Normalmente la victoria tiene muchos padres. Cuando UPyD tiene un buen resultado todo el mundo se lo apunta y cuando hay un mal resultado buscan un único culpable, un chivo expiatorio», ha lamentado.
En este sentido, ha aceptado que la dirección del partido tiene «toda la responsabilidad» tanto en las cosas que se hacen bien como en las que se hacen mal, pero ha advertido de que hay muchos «intereses» en que UPyD desaparezca porque «no quieren que las cosas cambien en España».
Los andaluces apoyan partidos con corrupción
Así, ha lamentado el resultado de las elecciones andaluzas, donde los ciudadanos han decidido «apoyar a partidos inmersos en tramas de corrupción». «Si alguien cree que es acertado, a mi no me lo parece», ha enfatizado recordando las nuevas detenciones efectuadas este martes por el presunto fraude de los cursos de formación.
«Creo que España tiene un problema gravísimo de corrupción y no deja de parecerme algo inquietante que en un país que está corroído por la corrupción el problema sea UPyD, el único partido que lucha denodadamente contra la corrupción», ha reconocido.