La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se reunirá este viernes con los presidentes del BBVA y Banco Santander, Francisco González y Ana Botín, respectivamente, para tratar la situación de los desahucios, en la misma línea que ya lo hizo antes de su investidura con el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.
Así lo ha adelantado en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press, donde ha reconocido que espera «ir convenciendo» a los responsables de las entidades bancarias que se trata de «una responsabilidad contraída con la ciudadanía» el que ayuden al Ayuntamiento de Madrid a «solucionar el problema de la vivienda».
«Ellos (los bancos) han recibido muchísimo y también de nosotros», ha señalado Carmena, que entiende que, por ello, los bancos tienen que devolver algo «esencial», que es ayudar a los ayuntamientos a buscar una alternativa habitacional a las personas afectadas por los desahucios.
En este sentido, ha explicado que con Bankia están «empezando a preparar un acuerdo» para que el banco pueda ceder viviendas vacías y el Ayuntamiento de Madrid las pueda poner en alquiler social. Es un «esbozo», y tienen que concretarlo, ha explicado Carmena, que todavía desconoce qué viviendas son y cuáles son las condiciones de las mismas.
Carmena ha indicado que el Ayuntamiento de Madrid está «especialmente preocupado» con «conseguir acabar con los desalojos y los lanzamientos» y «esa imagen terrible de dejar personas en la calle». De ahí, la importancia de tener un «contacto muy estrecho» con los bancos. También creen en el Consistorio que la vivienda es un «derecho social» y por eso, se le ha pasado del Area de Urbanismo al área de Derechos Sociales.
Sobre su relación con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Carmena ha indicado que, precisamente, están trabajando para que no tengan que ser ellos los que frenen los desalojos. Ha explicado que han reanudado las conversaciones con ellos y que si había un «enfado», ya se les está «quitando y mejorando».
Así, ha agradecido su papel por haber sacado el problema de los desalojos «a la calle» y ha insistido en que si no ha habido contacto antes con ellos ha sido porque estaban «tan preocupados» de conseguir una alternativa, como la negociada con Bankia, que no han tenido tiempo.