El presidente de Ciudadanos y candidato a la Presidencia del Gobierno español por este partido, Albert Rivera, ha aterrizado este lunes en Venezuela tras lograr pasar los trámites de inmigración de entrada al país sin problemas. Allí ha sido recibido por el embajador español en Caracas, Antonio Pérez-Hernández, y por la mujer del líder opositor Leopoldo López, Lilian Tintori quien ha dado las gracias a España por el apoyo y al líder de C's por viajar al país.
«Gracias España! Gracias a @Albert_Rivera por venir a Venezuela!» ha escrito en Twitter la esposa de Leopoldo López quien ha señalado que este lunes pudo ver al líder opositor. «Sigue aislado pero me pidió que no hable de él. Que sigamos trabajando en el rescate de Venezuela».
Por su parte Rivera, quien este martes tiene previsto intervenir ante la Asamblea Nacional, ha declarado a su llegada que Venezuela «es un país rico y merece un cambio» y ha anunciado que se reunirá con los familiares de los presos políticos y de las «víctimas» para conocer la situación del país.
Poco antes de viajar Rivera declaró que lo de Venezuela no solo es un problema político, sino «de subsistencia y humanitario». «A día de hoy en Venezuela no hay respeto a los derechos humanos ni a las normas constitucionales», dijo el líder de C's, quien señaló que quiere «escuchar y ayudar».
Normalidad
Rivera ha llegado al aeropuerto internacional Simón Bolívar, en Maiquetía, ubicado a unos 30 kilómetros al norte de Caracas, en torno a las 08.00 de la tarde -hora local, las 2.00 de la madrugada, hora peninsular española-.
Según ha explicado la cadena de televisión NTN24, ha sido recibido por el embajador español en Caracas, Antonio Pérez-Hernández, y por la mujer del líder opositor Leopoldo López, Lilian Tintori, después de haber pasado los controles de inmigración.
«He llegado con total normalidad», ha asegurado ante la prensa el candidato de Ciudadanos, que ha insistido en que su entrada en el país se ha realizado como en «cualquier otro aeropuerto del mundo». Antes de su llegada, se temía la posibilidad de que el oficialismo pusiera obstáculos a su entrada en el país.
«Sabíamos que había gente que no quería que viniéramos, pero venimos a colaborar con la democracia», ha añadido.
Rivera explicó antes de volar que su viaje al país, a invitación de la Asamblea Nacional, tiene como objetivo poner su «granito de arena» para que se abra el diálogo entre el Gobierno y la oposición. Tras aterrizar, ha insistido en que ha viajado al país «para colaborar con la democracia» y que se inicie «un diálogo efectivo para que no haya presos políticos, haya alimentos y medicinas y se acabe la crisis humanitaria que vive el país», donde el precio de la cesta de la compra se ha disparado un 700% en el último año, según los datos aportados este lunes por el Centro de Documentación y Análisis Social.
Diálogo
«Venimos con voluntad de diálogo y con el convencimiento de que la democracia no es negociable, es algo fundamental», ha insistido. Al preguntarle sobre su postura acerca del referéndum revocatorio que se está exigiendo contra el presidente, Nicolás Maduro, Rivera ha indicado que se trata de «una medida excepcional» pero que «también lo es la situación que vive Venezuela», por lo que «como mínimo, debe ser respetado».
El líder de C's ha recordado, como ya había realizado antes del viaje, que se había reunido con los expresidentes socialistas José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González y ha insistido en que «la mayoría de los partidos políticos democráticos» españoles están de acuerdo en «ayudar en el diálogo». «Salvo Podemos, por motivos obvios de apoyo al chavismo», ha remachado, en relación a la formación que dirige Pablo Iglesias.
Rivera ha recordado que su agenda en el país estará «muy apretada» ya que su estancia «no llega a 48 horas».
Este martes participará en un acto en la Comisión Permanente de Política Exterior de la Asamblea Nacional, a las 16.30 horas (hora española) y se reunirá con su presidente, Henry Ramos Allup. A éste le trasladará su disposición a reunirse con el Gobierno si alguno de sus miembros está dispuesto a ello, aunque ha reconocido que es improbable que acepten, puesto que altos cargos chavistas han llegado a hablar de no dejarle entrar en el país.
«Voy a plantear a la junta directiva de la Asamblea Nacional la posibilidad de reunirnos con el Gobierno», ha afirmado, desde el aeropuerto de Maiquetía.
Si bien los periodistas le han recordado que no tiene invitación formal del Ejecutivo venezolano para entrar en el país, Rivera ha recordado que tiene «una invitación formal de la Asamblea Nacional» y que en su viaje no quiere «polemizar con nadie», sino «buscar diálogo y soluciones».
En su segunda jornada también tiene prevista una reunión con otro opositor, Henrique Capriles, y con familiares de otros presos. Asimismo, se está organizando una reunión con españoles.