La Policía ha detenido a dos hombres en Gijón y San Sebastián que estaban «plenamente integrados» en la organización terrorista Dáesh, que se dedicaban a difundir su ideario en la red, alentaban a reclutar nuevos miembros e incitaban a cometer actos terroristas.
Según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado, el detenido en Gijón es un hombre de origen marroquí y nacionalizado español y el arrestado en San Sebastián es marroquí residente legal en España.
Dos «piezas clave» en el entramado propagandístico y de captación de la organización terrorista Dáesh, destaca Interior, que detalla que los detenidos, plenamente integrados tras su adhesión voluntaria, desarrollaban una intensa actividad a favor de la organización, adoctrinando, enalteciendo su ideario y alentando e incitando a la comisión de actos terroristas.
Aunque ambos individuos realizaban labores básicamente idénticas, mostraban peculiaridades diferenciadoras en su dinámica de actuación y en sus relaciones.
De esta forma, el arrestado en Asturias había divulgado, a través de las redes sociales, su jura de lealtad al Califato y al Califa Abu Baker Al Bagdadi y solicitaba a todos sus seguidores que se unieran a este juramento.
Unos mensajes que lanzaba desde su propio domicilio en Gijón, donde había creado una importante y organizada red de difusión virtual, además de haber establecido dispositivos de comunicación que contaban con unas férreas medidas de seguridad para dificultar su detección.
Así, empleaba teléfonos virtuales (servicios de telefonía que se ofrecen en la red y que permiten enviar mensajes con total anonimato), que eran utilizados para intercambiar información de manera segura con miembros y dirigentes de Dáesh.
Mientras, el detenido en San Sebastián, además de su actividad en Internet, mantenía un estrecho contacto con el entorno radical yihadista afincado en Guipúzcoa, lo que favorecía su labor de captación y radicalización, ya que, mayoritariamente, estaban constituido por personas susceptibles de exclusión social.
Los contenidos divulgados en las redes sociales por los detenidos tenían características perfectamente diferenciadas, desde comentarios propagandísticos para ensalzar virtudes de Dáesh a los extremadamente radicales y de demoledora crudeza.
Estos últimos se enmarcan, según los investigadores, en la estrategia del denominado «terror informativo» a la sociedad occidental a través de vídeos con contenidos violentos seleccionados en los que se enaltecía claramente la violencia terrorista, además de menospreciar y humillar a las víctimas.
La detención de estos individuos ha supuesto la neutralización de dos activos militantes del aparato propagandístico y de captación implantado por DAESH para la divulgación de contenidos yihadistas y captación, adoctrinamiento y reclutamiento de nuevos adeptos a su organización terrorista.
Estas operaciones, que continúan abiertas, han sido desarrolladas por agentes de las Brigadas Provinciales de Información de San Sebastián y Oviedo, en colaboración con la Comisaría General de Información y bajo la supervisión de los Juzgados Centrales de Instrucción número dos y número uno.
Desde que en junio de 2015 se elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 150 yihadistas, de los que 120 han sido arrestados en España y 30 en otros países con la colaboración los cuerpos policiales españoles.
Interior recuerda que, a través de la iniciativa 'Stop Radicalismos', cualquier ciudadano de forma confidencial puede alertar de casos de radicalismo en su entorno a través de los siguientes medios: la página web www.stop-radicalismos.es, la aplicación móvil de alertas de seguridad ciudadana Alertcops y el teléfono gratuito 900 822 066.