El mercado eléctrico mayorista marcó este miércoles un precio medio para este jueves de 85,79 euros el megavatio hora (MWh), lo que supone niveles máximos desde diciembre de 2013, en plena ola de frío.
Según los datos del operador OMIE, este precio de la electricidad era un 8,8 % más que el marcado para este miércoles, en 78,8 euros de media, y se acercó más a los 91,89 euros de media alcanzados en diciembre de 2013. Este jueves habrá horas del día en las que el precio superará los 95 euros.
En estas subidas de precios están influyendo varios factores. Por un lado, un contexto meteorológico «complicado» sin agua, la forma más barata de generar electricidad, y poco viento. A esto se ha unido la parada de parte de las centrales nucleares en Francia –lo que eleva el precio de su mercado y la convierte en importadora de España elevando los nuestros– y los altos precios de los combustibles fósiles.
«Es normal que los precios sean altos en este contexto y en esta época», señaló el director general de la comercializadora Factorenergia, Emilio Rousaud, que cuestiona, no obstante, el nivel de los picos que se están tocando.
El precio fijado para este jueves fue, por ejemplo, un 64 % más elevado que en la misma fecha del año pasado cuando se cerró en 52 euros de media.
El tipo de tarifa
Los precios que salen del mercado mayorista eléctrico afectan de distinta manera a los consumidores en función de la tarifa que tengan aunque, en términos generales, suponen algo menos de la mitad del recibo de luz. El resto del recibo depende de los denominados peajes, que fija el Gobierno, y los impuestos.
En el mercado eléctrico, con 25 millones de consumidores, hay dos opciones: la tarifa regulada o precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC), donde están unos 12 millones de usuarios, o el mercado libre, donde unos 13 millones tienen distintas tarifas con sus compañías.
Los que están acogidos al PVPC, y tienen contador inteligente, pagan la electricidad al precio que cotiza en el momento de consumirla de acuerdo con lo que arroja ese mercado mayorista, una vez corregidos una serie de factores. Los que no tienen contador, en base a una media que se calcula.
Quien no posee esta tarifa paga la electricidad al precio que fija su compañía. El precio de sus kilovatios hora está cerrado y consta en sus facturas. Y ante estas distintas opciones surge la eterna pregunta, ¿qué conviene más?
La respuesta depende del tipo de consumidor y del momento del año: los picos de precios de este invierno tenderán a suavizarse y habrá que ver cómo transcurre todo el ejercicio para poder comparar.
El último análisis de la CNMC, con datos hasta el primer semestre de 2016, indicaba que, frente a lo que ocurrió en el análisis de un año antes, la tarifa regulada fue la opción más barata para los pequeños con un ahorro de 32 euros/año.