La diputada y exdirigente de Podemos Carolina Bescansa ha asegurado este lunes que no se plantea dejar su escaño en el Congreso a raíz de la polémica suscitada en el partido por la difusión de un documento internoen el que ella se postulaba para relevar a Pablo Iglesias en la Secretaria General. «Ni se me pasa por la cabeza dejar el escaño. Es un disparate», ha sentenciado.
En declaraciones a La Sexta, Bescansa ha admitido que el documento objeto de la polémica salió de su ordenador y su despacho y ha asumido por ello «toda la responsabilidad», aunque considera que «no es motivo» para abandonar su acta de diputada.
Según ha explicado, el documento «es un borrador» al que cada cual iba realizando aportaciones, pero por «mala fortuna», cuando alguien de su equipo decide enviárselo, lo publica en el canal de Bescansa en la red social Telegram.
«No lo conocía ni yo», ha dicho la diputada en relación al contenido, para añadir: «Asumo que lo que haga mi equipo, es como si lo hubiera hecho yo, y quiero pedir disculpas por este incidente».
Preguntada directamente sobre sus aspiraciones a la secretaría General de Podemos, Bescansa, para quien es razonable que en una organización democrática cualquier persona pueda querer postularse a cualquier puesto de dirección, ha incidido en que «no está abierto ningún proceso para competir con por la dirección de Podemos».
«Es un debate extemporáneo, que está fuera de lugar, que no toca y que sitúa las cosas en un marco que no corresponde», ha destacado Bescansa, quien espera que «en el próximo Vistalegre o cuando toque haya varias candidaturas a la dirección» aunque ahora es «casi una ingenuidad» pretender negociar sobre este asunto porque no está en el horizonte.
En todo caso, considera «una mala señal que alguien piense que porque alguna persona en Podemos se postule o crea que se puede postular para una secretaría general le pueda acarrear algún tipo de problemas» y, en este sentido, considera «muy razonable» la posición expresada este lunes por la dirección del partido, que no va a aplicar ninguna amonestación sobre ella.
Precisamente, sobre la dirección, Bescansa ha afirmado que nadie se puso en contacto con ella tras la difusión del documento y lo atribuye a que dio «explicaciones» horas después de que sucediera, por lo que ya «no era necesario». «No tengo ningún problema en dar explicaciones a Pablo Iglesias, si me llama, y si me llama la dirección como órgano, también», ha apuntado.