La Mesa del Congreso, con los votos del PSOE y de Unidas Podemos, ha avalado este martes un reparto de los asientos del Salón de Pleno que sitúa a Ciudadanos a la derecha junto con el PP, al PNV y Unidas Podemos en primera fila, y a Vox en las filas superiores del hemiciclo.
El acuerdo ha contado con el voto en contra de Ciudadanos, que quería mantener una posición centrada y que se queja de no haber sido informado, mientras que el PP ha declinado participar en la votación al no existir unanimidad.
En el boceto que habían diseñado el PSOE y Unidas Podemos, los socialistas se reservaban toda la izquierda del hemiciclo, desplazando a Unidas Podemos, al área central y con cuatro escaños en primera fila para Pablo Iglesias, Irene Montero y otros colaboradores.
Al PNV, con sus seis diputados, le vuelven a reservar la primera fila de ese 'quesito' central del hemiciclo, aunque esta vez en la zona de la derecha. Y detrás de la posición privilegiada de los nacionalistas vascos se ha colocado a los independentistas catalanes de ERC con sus 15 escaños.
Por su parte, el Grupo Popular ha visto 'invadido' su espacio natural de la derecha con la presencia de los parlamentarios de Ciudadanos, que salen de la franja central que ocupaban en las dos últimas legislaturas.
Así, la primera fila del tercio de la derecha estará ocupada, por una lado, por Pablo Casado y su equipo más próximo, que repìten en sus mismos escaños, y al otro lado estará Albert Rivera y su núcleo de Ciudadanos. En cuanto a Vox, con sus 24 diputados, queda desplazado a las últimas filas del área central del hemiciclo, detrás de los independentistas catalanes y en los que se conoce como el 'gallinero'.
En las filas superiores, pero en la parte izquierda, el PSOE y Unidas Podemos han situado a los diputados del Grupo Mixto, que integran Junts, Bildu, Coalición Canaria, Unión del Pueblo Navarro, Compromís y el Partido Regionalista Cántabro, que también tienen algún escaño en la zona superior de la franja del PSOE.