Agentes de la Policía Nacional han detenido en la ciudad de Alicante a un hombre de 45 años que acumulaba más de 125 arrestos como presunto autor de delitos de robos con fuerza en el interior de vehículos. Tras la última detención, el Juzgado de Instrucción de Guardia ha decretado su ingreso en prisión.
Al parecer, el hombre, conocido por los agentes dadas sus más de 125 detenciones en esta ciudad por el mismo motivo, había convertido esta actividad en su modo de vida como consecuencia de su adicción a las drogas y esta práctica era su única forma de ingresos, según ha explicado Jefatura en un comunicado.
Los agentes encargados de la investigación observaron que el pasado año, durante la pandemia, había habido un incremento considerable en el número de denuncias por robos con fuerza en interior de vehículos que respondían a un mismo patrón. El modus operandi siempre era el mismo: se forzaba la cerradura o se fracturaban los cristales de las ventanillas de los vehículos.
Según las pesquisas policiales, todos los robos se concentraban en un mismo espacio de tiempo y tras analizar el historial delincuencial de esta persona, los agentes centraron la investigación sobre él. Comprobaron que ese mismo año había estado en prisión en tres ocasiones por hechos similares y, durante su internamiento, se había reducido sustancialmente este tipo de delitos. Al parecer, volvía a delinquir en todas las ocasiones al día siguiente de su puesta en libertad, saltándose además las restricciones decretadas como consecuencia de la pandemia.
Fue sorprendido por la víctima
En el último robo cometido el pasado mes de abril, el hombre fue sorprendido por la víctima dentro de su vehículo. En esta ocasión había forzado la puerta del maletero y se encontraba manipulando los efectos que había en el interior. Al ser descubierto huyó rápidamente con los objetos robados, valorados en más de 2.000 euros. Tras su huida se le cayó la cartera que portaba en el bolsillo con su documentación.
Una vez puestos estos hechos en conocimiento de los investigadores, el presunto autor fue rápidamente identificado, ya que, además de haber sido descubierto infraganti y de ser reconocido por la víctima, en la inspección ocular realizada en el propio vehículo se hallaron vestigios que correspondía con su identidad.