El abogado de la familia de Esther López, la vecina de Traspinedo (Valladolid) cuyo cadáver fue hallado en 2022 casi un mes después de su desaparición, estima que la titular del Juzgado de Instrucción número 5, encargada de la investigación y que en breve se incorporará a la Audiencia Provincial, no podrá concluir las pesquisas con el auto de transformación de las diligencias en procedimiento de la Ley de Jurado pero, pese a todo, se ha mostrado convencido de que el único sospechoso será llevado al banquillo.
Así lo ha expresado el letrado Guillermo Ruiz Blay al término de la toma de declaración este viernes a distintos peritos de la Guardia Civil y la defensa tomadas por parte de la jueza Soledad Ortega a lo largo de más de cuatro horas, las últimas que presidirá antes de coger la toga como magistrada de la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia de Valladolid y que, como principal objeto, tenían la finalidad de analizar distintos informes sobre geolocalización de teléfonos y respecto de unos supuestos daños estructurales en el vehículo del único sospechoso y la alteración de su centralita.
A la salida de los juzgados, el abogado de la familia se ha mostrado pesimista en cuanto a que la instructora acuerde medida alguna hoy mismo, sobre todo esa ansiada apertura de juicio oral, debido a que, como así ha advertido, aún queda pendiente de resolver un recurso en la Audiencia Provincial sobre la solicitud realizada por la defensa de Óscar S.M. demandando fotografías de la autopsia, petición que en su momento no se atendió por la jueza, y también queda por aportar parte del informe del experto colaborador de la Guardia Civil--pertenece a la empresa SEADA--en el que se considera probado que el investigado alteró intencionadamente la centralita de su Volkswagen T-Roc para borrar pruebas.
Con todo, Ruiz Blay, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha resumido que los informes periciales de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, frente a los informes de parte de la defensa, han sido realizados con el uso de máquinas más precisas y los mismos no hacen otra cosa que confirmar la versión de la parte acusadora en cuanto a que Óscar S.M. es el autor de la muerte de Esther López, y ello a pesar de la pericial aportada por las defensoras que descarta tanto los daños estructurales en el vehículo, reveladores de un hipotético atropello, como la supuesta manipulación de su centralita.
«El perito colaborador de la Guardia Civil confirma que la centralita fue borrada y que hubo un intento de codificar una llave nueva y que esa actuación no se hace en un taller común sino que para ello es preciso ponerse en contacto con una persona específica, con lo que mantenemos que nuestra versión del fallecimiento es la correcta», ha insistido el acusador.
Pese a ese pesimismo respecto de contar ya en las próximas horas con un auto de apertura de juicio oral con jurado, Guillermo Ruiz Blay tampoco entiende que la marcha de la instructora a la Audiencia Provincial vaya a entorpecer lo que ya es «un procedimiento con la instrucción terminada» y por ello confía en que bien su sucesor o sucesora dicten el auto que la acusación ha solicitado sin éxito ya en dos ocasiones.
Juicio en uno o dos años
«No tiene sentido mantener la instrucción. Hay un único sospechoso, que no ha sido capaz de dar explicaciones suficientes, y es preciso ir ya a juicio para que un tribunal competente determine si es culpable o inocente», trámite que, moviéndose en el terreno de la hipótesis, aventura que podría celebrarse en uno o dos años.
La jornada se iniciaba bien temprano en los alrededores del Edificio de los Juzgados, en la calle Angustias, ya que antes del comienzo de la toma de declaración a los distintos peritos una treintena de personas, entre familiares y amigos de Esther López, se ha concentrado a las puertas de dicha sede judicial para reclamar Justicia para la fallecida.
Con una gran pancarta con la fotografía de la víctima en la que se podía leer 'Sin justicia no hay descanso. Justicia para Esther', los allí concentrados, entre ellos el padre, la hermana y una prima de la fallecida, han coreado distintas consignas a la espera de que el abogado de la acusación particular hiciera acto de presencia para que les informara de cuanto estaba ocurriendo dentro.
En este sentido, Inés López, sí albergaba la esperanza de que la instructora, antes de cambiar de destino, anunciara ya este viernes su decisión de sentar en el banquillo a Óscar S.M, y ello tras dos años y medio de instrucción «que está enterrando viva a esta familia». «¡Sería una locura que no hubiera juicio!», ha apuntado.
Para la hermana de la víctima tal auto tendría que haber llegado ya mucho tiempo antes a tenor, a su juicio, del cúmulo de pruebas que la Guardia Civil ha puesto sobre la mesa y que apuntan a Óscar como autor material del asesinato de Esther.
«Los plazos de la Justicia no son los que nos gustaría. Lo único que esperamos es que nuestro abogado salga con el auto en la mano de transformación de las diligencias en procedimiento de jurado. Si la jueza, pudiendo marcharse ya, ha preferido practicar incluso hoy mismo esta prueba es para tomar la decisión final», manifestaba aún confiada Inés, sobre todo porque «sería una locura que la jueza o juez que llegue tenga que verse más de dos mil folios de investigación».