Un hombre ha sido condenado a pagar 12.595,66 euros prestados por el SEPE después de emprender un viaje a Marruecos sin avisar. El sujeto, según informa El Español, llevaba cobrando un subsidio por desempleo desde abril 2015, que se extendió hasta septiembre de 2019. Cabe destacar, que la ayuda, tal y como se refleja en la ley, se debe notificar.
En este sentido, los viajes deben ser avisado con antelación cuando se hacen al extranjero, sino puede derivar a consecuencias legales graves, tal y como se refleja en la Ley sobre Infracciones y Sanciones del Orden Social.
En el caso del hombre, este cogió un vuelo en enero de 2016 a Marruecos y permaneció hasta el 3 de febrero sin avisar al SEPE. Pero pasó desapercibido hasta agosto de 2018 al solicitar la reanudación, donde el SEPE vio que se había ido de viaje y abrió un expediente sancionador, donde se acabó descubriendo que había percibido 12.595,66 euros, dinero que debía ser devuelto a las arcas del Estado.
El hombre, según El Español, dijo que no le dio tiempo a avisar ya que fue algo improvisado por una emergencia familiar, puesto que su hermano había sufrido un «grave accidentes horas antes del vuelo» y no pudo hacer los trámites, además de indicar que el 15 de enero falleció el hermano. A pesar de ello, el SEPE desestimó la reclamación y la sanción se mantenía en pie, puesto que no avisó al regresara a España.
Ante la negativa del SEPE, el hombre decidió jugar sus cartas en el Juzgado de lo Social n.º 40 de Madrid, pero la ley no le dio la razón y el tribunal le recordó que la omisión de un viaje puede suponer la suspensión temporal o definitiva de la ayuda. También probó a ir al Tribunal Superior de Justicia de Madrid y parecía que todo empezaba a ir a mejor, puesto que el TSJM aflojó la cuerda y le dio la razón de forma parcial. De esta forma, se anuló la sanción y solo debía devolver el importe correspondiente al tiempo que estuvo de viaje.
El SEPE no estuvo de acuerdo con ello y decidió elevar la sanción al Tribunal Supremo. Ellos se justificaban con la Ley General de la Seguridad Social obliga a comunicar los viajes al extranjero, y la sanción al infractor debía ser aplicable a todos los efectos, se negaban a conjugar el verbo perdonar.
De esta forma, se volvió a reactivar la sanción y, finalmente, tuvo que devolver los 12.595,66 euros percibidos indebidamente.