Los alimentos que consumimos son importantes para una buena dieta, pero también hay que tener en cuenta las bebidas que tomamos. Algunas pueden ser muy beneficiosas gracias a sus minerales y vitaminas, como la mayoría de infusiones. En este caso, el té de hibisco es una opción que se puede tomar frío o caliente y que al no tener cafeína se puede consumir en cualquier momento del día.
Además, no tiene calorías y tiene un gran poder antioxidante, contiene potasio, magnesio y calcio. Por otra parte, tiene diferentes beneficios, como ayudar a bajar el nivel de colesterol malo o aporta vitamina C para mantener el sistema inmune.
Sus otros beneficios se encuentran en que reduce la tensión arterial, se puede tomar para contribuir el insomnio, mejora la función hepática y reduce la diabetes tipo II. Por otra parte, relaja los músculos, alivia el dolor menstrual, funciona para regular la salud de nuestro intestino, mejor el control del peso y tiene efecto laxante para combatir el estreñimiento.
Para prepararlo tan solo hace falta separar los cálices de la flor y enjuagarlos. Después, hay que hervirlos con agua y añadir un toque de limón y endulzar al gusto.