Los tres acusados por fingir accidentes en Palma para cobrar las indemnizaciones de la compañía aseguradora han aceptado este jueves una multa de 868 euros.
Los procesados simulaban lesiones y secuelas inexistentes para cobrar una indemnización que luego se repartían entre ellos. Para conseguir su propósito falsificaban informes médicos de dos clínicas de Palma.
El juez ha apreciado las atenuantes de dilaciones indebidas, ya que la causa ha estado paralizada entre 2007 y 2011, y la de reparación del daño después de que hayan pagado la responsabilidad civil.